En plena burbuja inmobiliaria, la costa se construye a ritmo frenético. Todo se llena de ladrillos y cemento. Pero detrás de las luces del paseo marítimo la ciudad cuenta otra historia. Una que transcurre en los sótanos de las urbanizaciones de chalets vacíos en invierno y en los edificios abandonados a medio construir. Una que habla de obras ilegales, de adolescentes que trabajan sin contrato ni medidas de seguridad, de sectas que captan miembros entre los habitantes de la ciudad.

Arde Torrevieja es una novela de terror hecha de los miedos que todos conocemos, esos que duermen detrás de los tabiques de nuestras casas. Juan y el Rojo construyen playas de baldosas mientras sueñan con una tercera hipoteca para comprarse un Audi. Sonia aguanta a turistas borrachos y planea huir cuanto antes de aquel lugar. Todos conocen lo que se esconde bajo los adoquines del paseo marítimo, pero en esta ciudad nada permanece enterrado demasiado tiempo.