Andoni Alonso, profesor, (1966) e Iñaki Arzoz, investigador independiente, (1966) han trabajado juntos desde 1989 —bajo el heterónimo de Cibergolem— en cuestiones sobre la desaparición de la cultura vernácula, los efectos de la tecnología en el imaginario social, su relación con las artes y con otras actividades humanas. La influencia de Illich ha sido determinante para su pensamiento, especialmente la crítica a la sociedad postindustrial. Se han especializado en eso que se llama de forma genérica como “cibercultura” desde la perspectiva de Ciencia, Tecnología y Sociedad (CTS). Ganaron el VII Premio Epson de Tecnoética con el libro La quinta columna digital en 2004 (Gedisa, 2005), donde investigan los movimientos sociales y políticos asociados a dos de las grandes cuestiones sociales de las redes desde el punto de vista comunitario: el software y el conocimiento libres. La cuestión de la crisis social y medioambiental, el Colapsoceno, en relación con las utopías, distopías y la ciencia ficción, y la desaparición de la diversidad cultural y de las comunidades, se ha convertido en el campo de investigación más reciente. Otros libros conjuntos han sido: La Nueva Ciudad de Dios (Siruela, 2002), donde se definía el término “tecno-hermetismo”, Carta al homo Ciberneticus: Un manual de Ciencia, Tecnología y Sociedad activista para el siglo XXI (Edaf, 2003) como posibilidad de una sociedad civil y activista en lo digital y El desencanto del Progreso. Para una crítica luddita de la tecnología (Dykinson, 2021) en el que se evaluaba la sociedad digital en la actualidad.