A la guerra con Satán
La Iglesia del Juicio Final & El Proceso
A finales de 1967, en las calles del activo barrio hippie del Haight-Ashbury de San Francisco, era frecuente cruzarse con extraños individuos vestidos con capas negras y crucifijos de plata, junto a perros pastores alemanes. Sin lugar a dudas, El Proceso, también conocido como La Iglesia del Juicio Final, fue uno de los cultos más extraños y salvajes de todo el siglo XX. Su lujosa revista, repleta de invocaciones a la guerra, el asesinato y la reconciliación entre Satanás y Cristo, atrajo durante un tiempo a figuras como Mick Jagger, Marianne Faithfull o George Clinton. También se llegó a decir que Charles Manson fue seguidor de El Proceso e incluso que Sirhan Sirhan, el asesino del candidato Robert F. Kennedy, fue inspirado por el culto.
CRISTO dijo: Amad a vuestros enemigos. El enemigo de CRISTO era SATANÁS y el enemigo de SATANÁS era CRISTO. A través del Amor se destruye la enemistad. A través del Amor, el santo y el pecador destruyen la enemistad entre ellos. A través del Amor, CRISTO y SATANÁS han destruido su enemistad y se han unido para el Final; CRISTO para juzgar, SATANÁS para ejecutar la sentencia”. Este fue parte del discurso apocalíptico de El Proceso, un culto liderado por los enigmáticos Robert y Mary Ann De Grimston; un discurso que anunciaba el inminente Final de los Tiempos, cuyas tropas de choque serían bandas de Ángeles del Infierno “con botas negras y subidos sobre harleys también negras, ataviados con chaquetas de cuero negro con el símbolo de El Proceso, con tachuelas en la parte delantera y la cruz en la parte de atrás.
19,00€
Categories: Contracultura i Art, Norteamérica, Religiones, teología y ateología
Paraules clau: juicio final, satanismo
A la guerra con Satán
La Iglesia del Juicio Final & El Proceso
A finales de 1967, en las calles del activo barrio hippie del Haight-Ashbury de San Francisco, era frecuente cruzarse con extraños individuos vestidos con capas negras y crucifijos de plata, junto a perros pastores alemanes. Sin lugar a dudas, El Proceso, también conocido como La Iglesia del Juicio Final, fue uno de los cultos más extraños y salvajes de todo el siglo XX. Su lujosa revista, repleta de invocaciones a la guerra, el asesinato y la reconciliación entre Satanás y Cristo, atrajo durante un tiempo a figuras como Mick Jagger, Marianne Faithfull o George Clinton. También se llegó a decir que Charles Manson fue seguidor de El Proceso e incluso que Sirhan Sirhan, el asesino del candidato Robert F. Kennedy, fue inspirado por el culto.
CRISTO dijo: Amad a vuestros enemigos. El enemigo de CRISTO era SATANÁS y el enemigo de SATANÁS era CRISTO. A través del Amor se destruye la enemistad. A través del Amor, el santo y el pecador destruyen la enemistad entre ellos. A través del Amor, CRISTO y SATANÁS han destruido su enemistad y se han unido para el Final; CRISTO para juzgar, SATANÁS para ejecutar la sentencia”. Este fue parte del discurso apocalíptico de El Proceso, un culto liderado por los enigmáticos Robert y Mary Ann De Grimston; un discurso que anunciaba el inminente Final de los Tiempos, cuyas tropas de choque serían bandas de Ángeles del Infierno “con botas negras y subidos sobre harleys también negras, ataviados con chaquetas de cuero negro con el símbolo de El Proceso, con tachuelas en la parte delantera y la cruz en la parte de atrás.
Categories: Contracultura i Art, Norteamérica, Religiones, teología y ateología
Paraules clau: juicio final, satanismo
Editorial: Felguera Ediciones
ISBN: 9788493746742
228 págs.
2ª