«Esa mala fama…»
«Especialistas homologados por autoridades desconocidas o meros auxiliares, los expertos revelan o comentan desde muy por encima todos mis necios errores, detestables talentos, grandes infamias y malas intenciones.»
Guy Debord (28 de diciembre de 1931 – 30 de noviembre de 1994) fue cineasta, miembro fundador y principal teórico de la Internacional Situacionista (1958-1972), estratega, amante del buen vino y del dolce far niente. Escribió dos obras fundamentales de crítica social, La sociedad del espectáculo (1967) y una actualización de esa misma crítica en Comentarios sobre la sociedad del espectáculo (1988). Debord, que era un apasionado de la cultura española, también tradujo al francés el anónimo Un «incontrolado» de la columna de hierro y las Coplas por la muerte de su padre, de Jorge Manrique.
En 1993 redactó este pequeño volumen —el último libro que publicó en vida— para refutar muchas de las opiniones emitidas sobre la I. S., sobre sus libros y sobre su persona entre los años 1988 y 1992.
«Me he dedicado ante todo y de forma casi exclusiva a vivir como más me convenía. […] No he tenido la vana pretensión abstracta de salvar el mundo; todo lo más, pensé en ayudar a aquellos a quienes consideraba mis amigos.»
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Categories: Contracultura i Art
«Esa mala fama…»
«Especialistas homologados por autoridades desconocidas o meros auxiliares, los expertos revelan o comentan desde muy por encima todos mis necios errores, detestables talentos, grandes infamias y malas intenciones.»
Guy Debord (28 de diciembre de 1931 – 30 de noviembre de 1994) fue cineasta, miembro fundador y principal teórico de la Internacional Situacionista (1958-1972), estratega, amante del buen vino y del dolce far niente. Escribió dos obras fundamentales de crítica social, La sociedad del espectáculo (1967) y una actualización de esa misma crítica en Comentarios sobre la sociedad del espectáculo (1988). Debord, que era un apasionado de la cultura española, también tradujo al francés el anónimo Un «incontrolado» de la columna de hierro y las Coplas por la muerte de su padre, de Jorge Manrique.
En 1993 redactó este pequeño volumen —el último libro que publicó en vida— para refutar muchas de las opiniones emitidas sobre la I. S., sobre sus libros y sobre su persona entre los años 1988 y 1992.
«Me he dedicado ante todo y de forma casi exclusiva a vivir como más me convenía. […] No he tenido la vana pretensión abstracta de salvar el mundo; todo lo más, pensé en ayudar a aquellos a quienes consideraba mis amigos.»