América Latina

  • <p>La calle, el puerto, los conventillos, los corrales, las c&aacute;rceles eran el magma donde se fragu&oacute; un decir que luego se elevar&iacute;a a canci&oacute;n en las primeras d&eacute;cadas del siglo XX. Ya los trovadores deLa Pampa, los payadores, y la gente del sainete despu&eacute;s, ven&iacute;an introduciendo el habla popular en sus composiciones. El tango lo hizo en algunos t&iacute;tulos inaugurales, en refranes y cuartetas, precarios, durante el tiempo que le llev&oacute; a consolidarse como m&uacute;sica y baile. Quienes lo inventaron eran carreros, estibadores, alba&ntilde;iles, pintores de brocha gorda, mec&aacute;nicos... Y las mujeres brillaron en la interpretaci&oacute;n cantada.</p> <p>En esta obra se incluyen las letras de las canciones tangueras m&aacute;s representativas de inspiraci&oacute;n libertaria, compuestas por Pascual Contursi, Jos&eacute; Gonz&aacute;lez Castillo, Celedonio Esteban Flores, Enrique Cad&iacute;camo, Francisco Garc&iacute;a Jim&eacute;nez, Enrique Santos Disc&eacute;polo, Mar&iacute;a Luisa Carnelli, Alfredo Le Pera, Homero Manzi, Jose Mar&iacute;a Contursi, Mario Batisttella, C&aacute;tulo Castillo, Homero Exp&oacute;sito, Eladia Bl&aacute;zquez. El tango visto por Borges y Carriego da cierre a las p&aacute;ginas bellamente ilustradas por Nicol&aacute;as Picatto.</p> <p>Rafael Flores Montenegro est&aacute; considerado, internacionalmente, como un gran conocedor de esta m&uacute;sica, su canci&oacute;n y baile popular. Es autor de originales ensayos literarios sobre sus emblem&aacute;ticas figuras.</p>
  • <p>Este libro recopila la reflexi&oacute;n colectiva de un grupo de colegas procedentes de las ciencias sociales (antropolog&iacute;a, historia, sociolog&iacute;a) alrededor de la noci&oacute;n de administraci&oacute;n de poblaciones &mdash;definida por Andr&eacute;s Guerrero&mdash; y de su potencial anal&iacute;tico para Am&eacute;rica Latina, desde los tiempos coloniales a la m&aacute;s reciente contemporaneidad. El punto nodal de la reflexi&oacute;n es el de las continuidades y los cambios en la relaci&oacute;n vers&aacute;til entre el Estado (sea este colonial, republicano, neoliberal o posneoliberal), los grupos sociales hegem&oacute;nicos y los grupos sociales sometidos o subalternos, en escenarios donde la dominaci&oacute;n de clase se ampara y se justifica con criterios de diferenciaci&oacute;n de car&aacute;cter &eacute;tnico. La singularidad de esta compilaci&oacute;n radica en la perspectiva te&oacute;rica priorizada y en su potencial para promover la contrastaci&oacute;n emp&iacute;rica. As&iacute; pues, tomando como punto de partida el eje articulador de las continuidades y los cambios en las formas de relaci&oacute;n del poder y los poderosos con las personas sometidas o subalternas, el libro presenta una serie de estudios de caso, emplazados en espacios y tiempos hist&oacute;ricos diversos y analizados a trav&eacute;s del concepto de administraci&oacute;n de poblaciones.</p>
  • Pobreza 2.0

    16,00
    <p>Convertir a las personas pobres en consumidoras y a la pobreza en un negocio rentable para las grandes corporaciones; construir un relato en el que las privatizaciones se presentan como &quot;alianzas p&uacute;blico-privadas&quot; y que, con la justificaci&oacute;n de luchar contra la pobreza, consolide los pilares del mercado; alinear las estrategias de cooperaci&oacute;n con los intereses comerciales de las compa&ntilde;&iacute;as multinacionales; y lograr que las ONGD consideren a las empresas transnacionales como sus aliadas, pasando de la cr&iacute;tica a la colaboraci&oacute;n subalterna. Estos son los principales objetivos de las estrategias empresariales que, contando con el apoyo de los gobiernos de los pa&iacute;ses centrales y los organismos p&uacute;blicos internacionales, est&aacute;n modificando todo el panorama de la cooperaci&oacute;n para el desarrollo. Desvelar c&oacute;mo hemos llegado hasta aqu&iacute; y los retos que afrontan las organizaciones solidarias es el prop&oacute;sito de este libro.</p>
  • PIROTECNIA

    12,00
    <p><em>PIROTECNIA: Ensayo miedoso de literatura ultra&iacute;sta</em> es el &uacute;nico libro que Hilda Mundy (1912, Oruro &ndash; La Paz, 1982), periodista y escritora vanguardista, rebelde y feminista, public&oacute; en vida. Fue una de las pocas escritoras de vanguardias de Am&eacute;rica Latina, junto con Magda Portal (Per&uacute;) y Mar&iacute;a Luisa Bombal (Chile).</p> <p>Edmundo Paz Sold&aacute;n nos muestra en su pr&oacute;logo c&oacute;mo este libro fue olvidado hasta que se rescat&oacute; el a&ntilde;o 2004 en una edici&oacute;n boliviana, en donde &laquo;&hellip;sus sesenta textos en prosa tratan de atrapar el ruido de la urbe en el nuevo siglo, producto de transformaciones tecnol&oacute;gicas, y los cambios de sensibilidad y de conducta de una modernidad incipiente en algunas ciudades en el occidente del pa&iacute;s, entre los que se cuentan un rechazo al contrato matrimonial y los nuevos roles a los que aspira la mujer&hellip;&raquo;</p> <p>Sus 60 textos en prosa tratan de atrapar el ruido de la urbe en el nuevo siglo y los cambios de sensibilidad y de conducta de una modernidad incipiente, entre los que se cuentan un rechazo al contrato matrimonial y los nuevos roles a los que aspira la mujer. Se trata de una escritura que registra los avances tecnol&oacute;gicos: el tel&eacute;fono, el alumbrado p&uacute;blico; los nuevos escenarios urbanos: el teatro, la confiter&iacute;a, el stadium; y se admira por ellos, aunque a veces se&ntilde;ala dudas ante el costo del progreso: del autom&oacute;vil, por ejemplo. Mundy se muestra como un esp&iacute;ritu l&uacute;dico, sus recursos estil&iacute;sticos son variados, pero como buena ultra&iacute;sta el eje central es la met&aacute;fora audaz y trabajar la materialidad del texto usando las may&uacute;sculas, las cursivas y los puntos suspensivos, que terminan convirti&eacute;ndose en una met&aacute;fora del tipo de escritura ligera que ella preconiza a trav&eacute;s de sus frases cortas, en oposici&oacute;n a una escritura pesada, ret&oacute;rica.</p> <p>En los a&ntilde;os '30, cuando Mundy escrib&iacute;a, la poes&iacute;a boliviana todav&iacute;a estaba atada a las formas del modernismo, ya superadas en el resto del continente; hubo que esperar hasta fines de los '50 para que ocurriera la renovaci&oacute;n. El m&eacute;rito de Mundy es por ello m&aacute;s importante, aunque quiz&aacute;s eso haya conducido a su obra escasa a un largo olvido.</p>
  • <p>Lo &ldquo;decolonial&rdquo; est&aacute; de moda. En Am&eacute;rica Latina, los estudios decoloniales han conseguido cierto &eacute;xito acad&eacute;mico, particularmente en las ciencias sociales y las humanidades. Sin embargo, sus ideas centrales no dejan de presentar inconsistencias y contradicciones que es necesario examinar. Hasta el momento las cr&iacute;ticas se encontraban dispersas, en textos aislados o debates truncos. En este libro colectivo se re&uacute;ne un conjunto de trabajos que, desde una pluralidad de perspectivas y lugares, desarrollan una cr&iacute;tica documentada y rigurosa a los estudios decoloniales y a sus principales autores.</p> <p>En este sentido, el libro busca ser una especie de contrafuego que permita contrarrestar los efectos de una moda intelectual y distinguir los estudios decoloniales de un anticolonialismo activo, basado en las alternativas descolonizadoras que construyen pueblos y comunidades frente a las formas actuales del despojo capitalista y en nombre de las cuales los autores decoloniales pretenden hablar. As&iacute; podremos &ldquo;liberarnos de los libertadores&rdquo; y hacer caer sus m&aacute;scaras.</p>
  • <p>El 11 de abril del a&ntilde;os 2002, quienes hacemos el peri&oacute;dico Rebeli&oacute;n nos sentimos terriblemente solos aqu&iacute; en Espa&ntilde;a, s&oacute;lo rodeados de mentira. No sal&iacute;amos de nuestro estupor cuando ve&iacute;amos a todas las bater&iacute;as medi&aacute;ticas aplaudiendo al un&iacute;sono lo que era sin ninguna duda un golpe de Estado. Mientras, nos estamos llegando correos electr&oacute;nicos estremecedores diciendo que estaban persiguiendo a los seguidores de Ch&aacute;vez, que hab&iacute;a comenzado una aut&eacute;ntica caza de hombres y mujeres, sobretodo en los barrios de clase media-alta donde los chavistas eran minor&iacute;a. Escenas de ministros engrilletados u hordas intentando cortar el suministros de agua y electricidad a una embajada no despertaban la m&iacute;nima reacci&oacute;n en ning&uacute;n medio ni gobierno.</p> <p>Como de todos es sabido, los venezolanos reaccionaron y reinstauraron su democracia en 47 horas, las horas en que Pedro Carmona estuvo en el poder. Una an&eacute;cdota es que existe un libro en Venezuela sobre ese periodo, se titula &laquo;47 horas es demasiado tiempo&raquo;. La impunidad con que actuaron tanto golpistas econ&oacute;micos y sociales como medi&aacute;ticos al creer que su crimen se hab&iacute;a consumado sin castigo, nos ofreci&oacute; escenas y situaciones excepcionales e inauditas. </p> <p>Fue algo as&iacute; como si mientras un grupo de ladrones estuviesen robando ocultos por la noche a las dos de la ma&ntilde;ana en la Puerta del Sol y, de repente, se hicieran las doce de la ma&ntilde;ana y su delito quedase expuesto a todos los viandantes que en esa hora atraviesan la plaza.</p> <p>Alguien m&aacute;s inteligente que quienes hab&iacute;amos ido recogiendo buenos textos en Rebeli&oacute;n sobre el caso, decidi&oacute; que se deb&iacute;a sacar un libro recopilatorio. Fueron Luis Alegre y Carlos Fern&aacute;ndez Liria con el apoyo de la editora Eva Forest. Ser&iacute;a un libro humilde y modesto en el formato, como todos los de esa editorial, una m&aacute;quina de fabricar joyas en envases modestos. Sugerimos unos textos, contactamos con los autores para recabar sus permisos y se tom&oacute; el t&iacute;tulo del cap&iacute;tulo de Carlos, un t&iacute;tulo elocuente en tres palabras: Periodismo y Crimen. Nobles y brillantes firmas de Venezuela, de Espa&ntilde;a, de Suecia, de Argentina y de Francia buscaron las pruebas y se&ntilde;alaron a los delincuentes en menos de quince d&iacute;as. Ese humilde y noble proyecto editorial permitir&iacute;a que la verdad que s&oacute;lo estaba en internet se hiciera tangible en papel. Era un libro sencillo pero que conten&iacute;a un gran tesoro, conten&iacute;a la verdad, la verdad que los medios ocultaban al mundo.</p> <p>Yo reconozco que no le ve&iacute;a entonces mucho futuro al libro. Pensaba que lo sucedido en Venezuela, con ser grave, iba a poder ser ocultado con un tupido velo por quienes seguro deseaban a toda costa que no se airearan su vergonzoso papel. El tiempo ha demostrado que yo estaba absolutamente equivocado porque, adem&aacute;s, seg&uacute;n he podido ver, aquella gesta del pueblo venezolano se ha incorporado a la memoria de ese pa&iacute;s como uno de los cap&iacute;tulos m&aacute;s bellos de su historia. Pero tambi&eacute;n a la historia de los medios de comunicaci&oacute;n como uno de los m&aacute;s infames. Y &laquo;Periodismo y Crimen&raquo; se ha convertido as&iacute; en un documento excepcional sobre el papel criminal de esos medios, una especie de relato de hecho probados, utilizando la terminolog&iacute;a judicial, la que corresponde al papel de los medios aquel mes de abril en Venezuela.</p> <p>En el mercado editorial, la vida habitual de un libro es de apenas tres meses. Han pasado m&aacute;s de dos a&ntilde;os y &laquo;Periodismo y crimen&raquo; se siguen agotando las ediciones, sigue estando en las librer&iacute;as, pero tambi&eacute;n en las sedes de las organizaciones sociales, en las mesas de los activistas en las fiestas de solidaridad. No cesan de ped&iacute;rmelo cada vez que voy a Venezuela. Frente a este libro, existe el caso opuesto, hace un par de meses se present&oacute; en la Casa de Am&eacute;rica otra obra &laquo;Cisneros, un empresario global&raquo;, un autopaneg&iacute;rico de uno de los cerebros &ndash;por utilizar alg&uacute;n t&eacute;rmino- de aquel golpe. Con todo el boato y la disposici&oacute;n de recursos e instalaciones p&uacute;blicas, como la Casa de Am&eacute;rica, ese libro se ha ido publicitando, presentado y situando en las mejores estanter&iacute;as de los grandes centros comerciales. Pero por mucho dinero que se inyecte a su campa&ntilde;a de publicidad, le queda un mes de vigencia. Dentro de dos a&ntilde;os, a diferencia de &laquo;Periodismo y Crimen&raquo;, &laquo;Cisneros, un empresario global&raquo; se estar&aacute; pudriendo en los almacenes. Es impensable la existencia de varias personas escuchando una nueva presentaci&oacute;n. Y es que la verdad, a diferencia de la apolog&iacute;a del crimen, no caduca. <strong><br /> </strong></p> <p><strong>Pascual Serrano</strong></p>
  • <p>A Cul&iacute; su madre siempre le hund&iacute;a s&uacute;plicas con una negativa definitiva: &ldquo;Cuando lluevan peces del cielo&rdquo;. Eso da&ntilde;a las defensas de cualquiera, y coloca la primera piedra de una rebeld&iacute;a incontestable. Es el comienzo de una vida de lucha y de observaci&oacute;n. Mucha observaci&oacute;n. Aunque a veces lo que suceda sea dif&iacute;cil de creer. Carla Guimar&atilde;es presenta, en su segunda novela, las memorias de una inquieta periodista brasile&ntilde;a que, antes de serlo &ndash;entre los 8 y los 18 a&ntilde;os&ndash;, vio pasar ante sus ojos el funeral de la dictadura, la vejez de sus abuelos, el rosario de la corrupci&oacute;n y la ilusionante pelea de una nueva juventud.</p>
  • <p>M&aacute;s de la mitad de los hidrocarburos que se extraen en Argentina provienen de la Patagonia, por tal motivo no resulta extra&ntilde;o que esta actividad condicione la vida pol&iacute;tica y social de esas tierras australes. <br /> En los &acute;90, en paralelo al auge privatizador, se profundiz&oacute; al interior del Pueblo Mapuche un proceso de emergencia pol&iacute;tica y cultural caracterizado por movilizaciones que, sobre mediados de esa d&eacute;cada, llegaron a las comunidades devenidas campos petroleros.<br /> La colisi&oacute;n de intereses se tradujo en protestas, represi&oacute;n y judicializaci&oacute;n de comuneros mapuche.</p> <p>A trav&eacute;s de este libro intentamos documentar un recorrido por las pol&iacute;ticas de Estado que abren las puertas a las corporaciones petroleras; los impactos ambientales, culturales y sociales que esta actividad genera, y las estrategias de resistencia y demandas de las comunidades mapuche que se oponen a la explotaci&oacute;n de sus territorios.</p>
  • <p>A lo largo de una d&eacute;cada fueron millares los que participaron de manera an&oacute;nima en ese quehacer colectivo, y muchos tambi&eacute;n los que dejaron su vida defendiendo aquellos ideales. La guerra de la contra, apoyada y financiada por los EE.UU., no dio tregua. En 1989, Josefina, Xuacu y Montse decidieron emprender ese viaje. <em>Pasaje a Nicaragua</em> es el testimonio personal de aquella experiencia.</p>
  • <p>&laquo;La guerra no se puede contar&raquo;, dice una de las voces de este libro, y quiz&aacute;s ello explique que Graciela Speranza y Fernando Cittadini, los autores -los mediums-, dejen a la guerra, viva agazapada en la memoria de sus protagonistas, contarse a s&iacute; misma. <em>Partes de guerra</em> est&aacute; construido con los relatos de un grupo de soldados, oficiales y suboficiales argentinos que estuvieron en primera l&iacute;nea del conflicto de las Islas Malvinas. Libro coral, intenso y conmovedor, ofrece un impecable e in&eacute;dito trabajo de montaje: no se limita a transcribir ordenadamente los diversos testimonios, sino que a partir de ellos, respetando los tonos personales, urde la trama de un relato &uacute;nico con la tensi&oacute;n dram&aacute;tica de la propia ficci&oacute;n.</p>
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