El colega Carlos Azagra nació, como tú y yo, en esta "unión de desatinos en lo universal" llamada España. Maño, como Buñuel, aunque nacido en Morón de la Frontera (Sevilla), supo desde el principio que los curas viven por la cara, los civiles por el tricornio y los caciques por la bragueta; que el franquismo agonizó matando, y que la demoqué desembarcó cargada de parásitos.