Salud

  • <p>&iquest;Qu&eacute; es la psicolog&iacute;a critica? es la pregunta a la que responde este libro-exploraci&oacute;n. David Pav&oacute;n-Cu&eacute;llar ofrece un texto que sirve simult&aacute;neamente como estudio introductorio, esbozo anal&iacute;tico, recorrido hist&oacute;rico, visi&oacute;n panor&aacute;mica y mapa orientador para los interesados en el tema.</p> <p>Despu&eacute;s de reflexionar acerca de lo que es la psicolog&iacute;a cr&iacute;tica, se reconstruyen sus antecedentes en la especulaci&oacute;n filos&oacute;fica y en la discusi&oacute;n pol&iacute;tica. En seguida se presentan algunos aportes de Lev Vygotsky y Georges Politzer, el freudomarxismo, la Escuela de Fr&aacute;ncfort y la corriente psicol&oacute;gica radical. A continuaci&oacute;n tras examinar la huella del althusserianismo en cr&iacute;ticos de la psicolog&iacute;a como Michel P&ecirc;cheux, Didier Deleule, Carlos Sastre y N&eacute;stor Braunstein, el autor aborda tres paradigmas de la psicolog&iacute;a cr&iacute;tica en el &uacute;ltimo cuarto del siglo XX: el foucaultiano, el de la escuela de Holzkamp y el posmoderno social-cr&iacute;tico socioconstruccionista, relativista y discursivo o colectivo de Rom Harr&eacute;, Kenneth Gergen, Jonathan Potter y otros.</p> <p>El recorrido hist&oacute;rico termina con una valoraci&oacute;n de la crisis del posmodernismo, patente desde finales del siglo XX, y con una consideraci&oacute;n de las dos alternativas realistas cr&iacute;ticas que el autor juzga m&aacute;s importantes para el siglo XXI: por un lado en Latinoam&eacute;rica, la psicolog&iacute;a de la liberaci&oacute;n y la social comunitaria; por otro lado en el &aacute;mbito brit&aacute;nico, la opci&oacute;n de Ian Parker.</p> <p>En un balance de la actualidad, se consideran las grandes orientaciones te&oacute;ricas actuales en las que desembocan las tradiciones revisadas. Por &uacute;ltimo, para mostrar la vigencia de la politizaci&oacute;n de la psicolog&iacute;a cr&iacute;tica, se comentan sus posiciones anticapitalistas, antirracistas, anticoloniales, antipatriarcales y antinormativas.</p>
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    Sexo es una palabra divertida facilita conversaciones con criaturas entre 7 y 10 años sobre cuerpos, género y la sexualidad, pero también sobre límites, seguridad y placer.
  • <p>Libro que re&uacute;ne los jarabes y electuarios de Avenzoar, suerte de prontuario de su obra m&eacute;dica m&aacute;s ambiciosa, el Taysir, o libro que facilita la medicaci&oacute;n y la dieta.</p>
  • <p>En su origen, este libro fue un manifiesto pol&iacute;tico publicado en un fanzine en 2009. Denunciaba la violencia gineco-obst&eacute;trica y otras pr&aacute;cticas abusivas desde la medicina hegem&oacute;nica hacia los cuerpos de las mujeres. Con el tiempo, este material se fue transformando en una investigaci&oacute;n aut&oacute;noma que tuvo muchas reescrituras, enfocadas en recuperar conocimientos de salud popular olvidados, para ponerlos al servicio de la autogesti&oacute;n de nuestra salud: autoex&aacute;menes, acercamiento consciente a los ciclos vitales, trabajo sobre las heridas que compartimos con nuestras madres, realizaci&oacute;n de infusiones y brebajes. Este es un manual introductorio, que arremete contra los tab&uacute;es fundacionales de esta sociedad e invita a seguir, pues hay mucho que trabajar y volver a sembrar.</p>
  • <p>De la mano de Audre Lorde &ndash;mujer, negra, poeta, feminista, madre, lesbiana, amante, guerrera&ndash; nos sumergimos en Los diarios del c&aacute;ncer, publicado por primera vez en 1981. Este &iacute;ntimo diario pone en evidencia c&oacute;mo la escritura puede ser una preciada herramienta ante una crisis: permite revelar lo que duele, nombrar el sentir m&aacute;s desgarrador a trav&eacute;s de la acci&oacute;n po&eacute;tico-pol&iacute;tica que implica decir, llevar a la palabra, inteligible para otras, lo que se hace alquimia en el cuerpo. Porque la palabra es la primera experiencia com&uacute;n. Y, desde ese gesto de desandar el silencio, Audre propone una cercan&iacute;a que convierte su vivencia en la de una voz colectiva.</p>
  • <p>La medicina actual no quiere plantearse las causas del aumento de enfermedades, ya que estas constituyen la base misma de la sociedad y del sistema econ&oacute;mico: ciudades masificadas, consumismo, trabajo precario y alienante, sobreproducci&oacute;n, contaminaci&oacute;n y falta de cohesi&oacute;n social, lo que genera estr&eacute;s, frustraci&oacute;n, angustia, falta de motivaci&oacute;n y de alegr&iacute;a, etc. Las estrategias m&eacute;dicas fracasan porque concentran demasiados esfuerzos en atajar la enfermedad pero nunca las condiciones estructurales que las causan. Asimismo, la medicina moderna pone en pone en riesgo el conocimiento popular, el conocimiento que tiene cada persona sobre su propio cuerpo y la capacidad curativa de este. El sistema capitalista arrebata a las comunidades sus conocimientos y concepciones sobre la salud, la enfermedad y su tratamiento. Una verdadera invasi&oacute;n farmac&eacute;utica pretende convencernos de que no hay salud fuera de los procedimientos de la clase m&eacute;dica profesional. Un nuevo lenguaje, elaborado en las altas esferas sociales, impregna entonces la sociedad, reduciendo lo que constituye un punto esencial de la salud de cada invididuo: su autonom&iacute;a personal.</p> <p>Iv&aacute;n Illich define la medicina actual como el monopolio radical de los expertos: tecn&oacute;cratas como los que m&aacute;s, desde los ministros de salud y los gerifaltes de las multinacionales farmac&eacute;uticas y biotecnol&oacute;gicas, pasando por parte del personal de cl&iacute;nicas y hospitales (como los m&eacute;dicos comprados por los visitadores de las farmac&eacute;uticas, sin pensamiento cr&iacute;tico o sin vocaci&oacute;n). Illich aborda tambi&eacute;n temas como al diagn&oacute;stico y el estigma. Y analiza, desde la antropolog&iacute;a social, c&oacute;mo percibimos y significamos el dolor o la muerte en nuestra cultura.</p> <p>En el momento actual de pandemia decretada es m&aacute;s necesario que nunca recuperar las reflexiones de un pensador de la altura de Iv&aacute;n Illich. Esta nueva edici&oacute;n de <em>N&eacute;mesis m&eacute;dica</em> incluye una nueva introducci&oacute;n, un texto del autor reflexionando sobre el libro, y otros art&iacute;culos; adem&aacute;s de un cap&iacute;tulo de David Cayley, su principal disc&iacute;pulo, sobre la pandemia del coronavirus. La medicina actual ha degenerado, quiere ser due&ntilde;a de toda nuestra vida: su ideal es la prevenci&oacute;n absoluta, totalitaria; encomendar&aacute; ilusamente a la gen&eacute;tica el crear un cuerpo mudo: pura fuerza de trabajo y de consumo, aun sabiendo que el precio de destruir la capacidad curativa innata es la enfermedad degenerativa (medicalizaci&oacute;n permanente: crear un enfermo incurable).</p>
  • <p>Este c&oacute;mic va de la locura. Y para eso he hablado de mi propia locura, de las voces y los ruidos que escucho en mi cabeza. De las cosas que me han pasado y de c&oacute;mo veo el mundo. Lo he intentado. La honestidad es un camino jodido. La mayor parte de las series, pel&iacute;culas y novelas que tratan el tema lo hacen desde el estereotipo y siempre me han resultado ajenos o grotescos. Yo quer&iacute;a hablar y no dejar de hacerlo hasta haber liberado la vida del lugar en el que se encuentra aprisionada. No ha sido f&aacute;cil. Los pinceles de Mario se han ido encontrando con mis palabras durante varios a&ntilde;os y ahora el relato por fin est&aacute; impreso. Feliz digesti&oacute;n.</p>
  • <p>Otto Gross (1877-1920). Asistente de Sigmund Freud y uno de los primeros investigadores del psicoan&aacute;lisis. En Munich entra en contacto con los c&iacute;rculos de la bohemia revolucionaria y rompe con Freud a causa de la orientaci&oacute;n cr&iacute;tica y pol&iacute;tica que le da a la t&eacute;cnica psicoanal&iacute;tica. Otto Gross tuvo una considerable influencia sobre los artistas y escritores de su generaci&oacute;n, entre ellos, Franz Kafka, a quien conoci&oacute; durante su estancia en Praga, que se inspir&oacute; en su detenci&oacute;n y encierro en un psiqui&aacute;trico, cuyo art&iacute;fice fue el padre, para la redacci&oacute;n de su obra <i>El proceso</i>.</p>
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