feminismo

  • <p><em>Esto es un manual de lucha, de supervivencia, de resistencia, de entrenamiento, de fracasos y &eacute;xitos y de estrategia.</em></p> <p><em>Un manual de camarader&iacute;a, de aguante, de ca&iacute;das y reca&iacute;das, de trucos, de sororidad, de hermandad, de t&eacute;cnica y de aliento.</em></p> <p><em>Esto es un manual de cotidianidad, de familia, de amigxs, de examigxs, de parejas, de compa&ntilde;erxs y de enemigxs.</em></p> <p><em>Esto es un manual de vida.</em></p> <p><em>Manual Ninja</em> es un texto escrito desde la experiencia. No pretende sentar c&aacute;tedra ni desarrollar ninguna teor&iacute;a. Es feminismo en pr&aacute;ctica, con sus contradicciones, sus altibajos, sus errores y sus aciertos.</p> <p>La autora utiliza sus propias pr&aacute;cticas para imaginar y apostar por una actitud ninja. A trav&eacute;s de la revisi&oacute;n de tres situaciones cotidianas y bien conocidas por todas, la autora va descubriendo estrategias de resistencia emocional y lucha feminista y antipatriarcal.</p>
  • <p>Este texto, publicado originalmente en 1993 y cuya finalidad fue la transmisi&oacute;n delos debates internos para poder abrir un canal de discusi&oacute;n con otras MujeresLesbianas con una perspectiva feminista-revolucionaria, abarca la autocr&iacute;tica y el an&aacute;lisis de acciones pasadas, los procesos hist&oacute;ricos que atravesaron, las perspectivas del momento, etc&eacute;tera.</p> <p><em>&laquo;Dese</em><i>amos discutir con MujeresLesbianas que tienen una perspectiva feminista-revolucionaria en la cabeza, en el vientre y en el coraz&oacute;n, y que la llevan a la pr&aacute;ctica en distintos niveles. Nos entendemos como parte de esta lucha a la que queremos entregar nuestras posiciones, nuestras experiencias, nuestra forma especial de organizaci&oacute;n y de praxis. S&oacute;lo vamos a avanzar en ello cuando reunamos los diferentes niveles de resistencia, de desarrollo de nuestra fuerza de mujeres, de ataque a este sistema y cuando nos tengamos en cuenta unas a otras, nos apoyemos, nos critiquemos y (con todas las diferencias) nos comprendamos como unidad. Seguro que ser&aacute;n necesarias algunas redefiniciones, pero nuestro accionar se sostiene, igual que antes, en nuestra rabia y nuestro odio contra los ataques cotidianos, directos y estructurales de una sociedad patriarcal, y en nuestra esperanza de abolir la opresi&oacute;n y la explotaci&oacute;n racista, antisemita y sexista en todo el mundo.&raquo;</i></p> <p>Tenemos claro que los m&aacute;s de 20 a&ntilde;os y los territorios que separan estos escritos con nuestras realidades actuales han de ser tenidos en cuenta a la hora de reflexionar sobre ellos. Pero nos parecen de gran inter&eacute;s a la hora de articular t&aacute;cticas y discursos antipatriarcales/antiracistas/internacionalistas que se complementen a partir de las distintas realidades, pues la mayor&iacute;a de las reflexiones y cr&iacute;ticas que se hacen son profundamente actuales.</p>
  • <p><em>La Madeja</em> vuelve un a&ntilde;o despu&eacute;s con algunos cambios. El m&aacute;s importante, quiz&aacute;s, es que abandonamos las secciones para hacer n&uacute;meros monogr&aacute;ficos. Hemos elegido como punto de encuentro, para empezar, el tema del cuerpo.</p> <p>El cuerpo, as&iacute;, sin m&aacute;s indicaciones, el cuerpo como significante abierto, dispuesto a llenarse de diferentes significados. &Eacute;sa ha sido nuestra intenci&oacute;n al invitar a algunas personas que, desde distintos posicionamientos te&oacute;ricos y sobre todo vitales, trabajan sobre/desde/en/a trav&eacute;s del cuerpo. As&iacute;, en este nuevo n&uacute;mero podemos encontrar un buen muestrario de cuerpos: cuerpos, presencia y voz que buscan hacer un hueco a las palabras, cuerpos de mujeres que envejecen, cuerpos atravesados por un sistema que los niega y los objetiviza, cuerpos de mujeres que buscan hacerse grandes a trav&eacute;s del placer, cuerpos que son nombrados fuera de la l&oacute;gica de la supuesta normalidad, cuerpos de mujeres fotografiados en las c&aacute;rceles de Argentina, cuerpos masculinos que reflexionan sobre su cuerpo, sobre el lenguaje que lo narra, cuerpos que habitan las guerras, cuerpos que dialogan con la palabra po&eacute;tica, cuerpos de otros continentes, cuerpos que bailan, cuerpos que resisten, cuerpos que se encuentran frente a los espejos, cuerpos herejes, cuerpos que se adornan, cuerpos doloridos, cuerpos que dan a luz, cuerpos que dan luz&hellip; Cuerpos.</p>
  • <p>&iquest;Son los cuidados precauciones? Precauciones, quiz&aacute;s, ante la fragilidad de la supervivencia. &iquest;Cu&aacute;ntas veces en la vida hemos escuchado mandatos que hac&iacute;an referencia a los cuidados?</p> <p>Dedicar atenci&oacute;n a algo, a alguien, a nosotras mismas, al tiempo, a la enfermedad, a las decisiones, a la alegr&iacute;a, al con las otras&hellip; Al descuidar, tambi&eacute;n. Dedicar inter&eacute;s a la vejez, a la muerte y a la vida, a las crianzas, a la econom&iacute;a. Dedicar atenci&oacute;n a quien es diferente y a quien se mueve a nuestro lado. Una vez m&aacute;s, repensar los afectos. Pero tambi&eacute;n la fuerza de nuestras acciones, las alianzas, los pies en la tierra, los desenga&ntilde;os, las ciudades que habitamos. No olvidarnos de las que no est&aacute;n. Y saber pedir y recibir. Dedicar inter&eacute;s a quien dice de otra forma, a quien explora otros lenguajes.<br /> En este nuevo n&uacute;mero de La Madeja hemos querido sumergirnos, preguntar, compartir, indagar, dejar espacio a las propuestas, a la escucha, a diferentes formas de entender qu&eacute; implica esto de los cuidados desde perspectivas feministas y por qu&eacute; son tan importantes.</p>
  • <p><span style="font-weight: 400;">Despu&eacute;s de haber buceado en nuestros miedos, ten&iacute;amos ganas de un n&uacute;mero m&aacute;s alegre y disfrut&oacute;n. Decidimos entonces abordar las sexualidades &ndash;en plural, porque, como nosotras, son diversas&ndash; intentando dejar a un lado sus sombras y centr&aacute;ndonos m&aacute;s en el placer, el goce, el erotismo; reivindicando unas relaciones basadas en el consentimiento, el di&aacute;logo y el respeto. Pero, las sombras se han negado a irse y, una vez que nos ponemos a darle vueltas a la sexualidad, aparecen, una y otra vez. Hay ganas de hablar, aunque tambi&eacute;n asusta. A qui&eacute;n no le cuesta desnudarse si no hay intimidad, confianza, seguridad&hellip; Hablar de sexualidades es abrir una caja de pandora, que nos trae placeres y dolores, y nos ense&ntilde;a que tambi&eacute;n en esto tenemos que acompa&ntilde;arnos, con cuidado, para aprender juntxs.</span></p>
  • <p>Durante los &uacute;ltimos a&ntilde;os, nosotros y nosotras, internacionalistas de todo el planeta, venimos trabajando en muchos aspectos de la Revoluci&oacute;n en Rojava. Animados y animadas por el punto de vista revolucionario del movimiento de liberaci&oacute;n kurdo, hemos venido a aprender, a apoyar y a contribuir al desarrollo de los proyectos existentes. Nuestro objetivo es organizar una nueva generaci&oacute;n de internacionalistas, que se enfrenten a la modernidad capitalista. Con el apoyo del movimiento juvenil de Rojava (YCR/YJC) fundamos la Comuna Internacionalista de Rojava a principios de 2017. Hasta el d&iacute;a de hoy, nuestros proyectos incluyen la organizaci&oacute;n de actividades educativas, delegaciones, cursos de idiomas y la construcci&oacute;n de la primera academia civil para internacionalistas en Rojava.</p> <p>Un pueblo alienado de la naturaleza lo est&aacute; tambi&eacute;n de s&iacute; mismo. Se vuelve autodestructivo. Ning&uacute;n sistema ha mostrado esto de forma tan clara como la modernidad capitalista. La destrucci&oacute;n del medio ambiente y las crisis ecol&oacute;gicas se dan la mano con la opresi&oacute;n y la explotaci&oacute;n de las personas. La irresponsable mentalidad de la obtenci&oacute;n del mayor beneficio econ&oacute;mico posible ha llevado a nuestro planeta al borde del precipicio y ha sumido a la humanidad en una espiral de guerra, hambre y crisis social. Por todo ello, el desarrollo de una sociedad ecol&oacute;gica es uno de los pilares de la Revoluci&oacute;n en Rojava, junto con la liberaci&oacute;n de la mujer y la democratizaci&oacute;n completa de todos los aspectos de la vida. Va m&aacute;s all&aacute; de la protecci&oacute;n de la naturaleza, de poner coto al da&ntilde;o que se le inflige. Se trata de recuperar el equilibrio entre las personas y la naturaleza. Se trata de una &ldquo;unificaci&oacute;n renovada, consciente e informada hacia una sociedad natural y org&aacute;nica&rdquo;. (Abdullah &Ouml;calan).</p>
  • <p>Este libro recoge el di&aacute;logo mantenido entre Donna Haraway y Marta Segarra con el que se clausur&oacute; el ciclo de debates de pensamiento del CCCB del 2018, &laquo;Despu&eacute;s del fin del mundo&raquo;. El di&aacute;logo busca profundizar algunas de las ideas expuestas por Haraway en su libro Seguir con el problema. Generar parentesco en el Chthuluceno, entre ellas: c&oacute;mo los feminismos han contribuido a pensar de forma diferente, no solo sobre las mujeres y el g&eacute;nero, sino tambi&eacute;n sobre el planeta, y qu&eacute; papel tienen las mujeres a la hora de hacer el planeta m&aacute;s habitable; la necesidad de velar por un mundo m&aacute;s integral y menos binario; y de aprender tanto a habitar el mundo, como a configurar mundos. Asimismo, invita a ampliar las estructuras de parentesco a &laquo;parentescos raros&raquo;, velando por relaciones de solidaridad y lazos que contemplan la respons-habilidad de los unos con los otros, y neg&aacute;ndose a pensar que esto es algo exclusivamente humano.</p>
  • <p>Desde la crisis de 2008, el neoliberalismo, para sostener sus modos de explotaci&oacute;n, para contener la implosi&oacute;n social en cada territorio, ha necesitado de una alianza cada vez m&aacute;s f&eacute;rrea con el fascismo y con formas varias de fundamentalismo religioso. Con ello ha pretendido reordenar la re-producci&oacute;n social en t&eacute;rminos capitalistas, recolocar un mandato de g&eacute;nero en crisis y retrazar las l&iacute;neas entre lo humano y lo categorizado como menos-que-humano (feminizado, racializado, naturalizado).</p> <p>Frente a esta nueva ofensiva neoliberal, el feminismo transnacional ha aparecido como un actor inesperado. Ha reabierto lo que parec&iacute;a clausurarse y lo ha hecho de nuevo con esa mezcla de radicalidad y masividad, de fuerza internacionalista y operatividad local, de conectividad y arraigo. Lo que se juega hoy en las disputas por los sentidos del feminismo no es la divisi&oacute;n de un movimiento que por otro lado siempre fue m&uacute;ltiple y poli&eacute;drico. Se juega la capacidad de incidir en el punto de sutura entre neoliberalismo y fascismo. Se juega la potencia feminista misma, en su desbordamiento.</p>
  • <p>La hist&oacute;rica revista mujeres Libres se imprimi&oacute; por primera vez en mayo de 1936. Editada por mujeres del poderoso movimiento libertario, la revista buscaba a trav&eacute;s de la formaci&oacute;n, la reflexi&oacute;n y la denuncia, dotar a las mujeres de una voz espec&iacute;fica en la lucha global por la igualdad y la libertad de los seres humanos.</p> <p>&nbsp;</p> <p>&ldquo;El primer objetivo de la lucha de la mujer consiste en hacer comprender al hombre y en primer lugar a sus padres, hermanos y parientes, qye sin la libertad de las mujeres no vale nada la de los hombres&rdquo; o &ldquo;Estamos ciertas que miles de mujeres reconocer&aacute;n aqu&iacute; su propia voz, y pronto tendremos junto a nosotras toda una juventud que se agita desorientada en f&aacute;bricas, campos y universidades, buscando afanosamente la manera de encauzar en f&oacute;rmulas de acci&oacute;n sus inquietudes&rdquo;. Son dos de las declaraciones de intenciones que las editoras incluyeron en este primer n&uacute;mero.</p> <p>La revista pronto se convirti&oacute; en el &oacute;rgano de expresi&oacute;n de Mujeres Libres, una organizaci&oacute;n que lleg&oacute; a contar con 28.000 mujeres afiliadas, 147 agrupaciones locales conocidas y una gran actividad cultural, pedag&oacute;gica y revolucionaria.</p> <p>--</p> <p>Dentro de la labor de difusi&oacute;n de la cultura libertaria, la Fundaci&oacute;n Anselmo Lorenzo ha decidido reimprimir la primera &eacute;poca (1936-39) de esta revista anarcofeminista, sepultada en la doble fosa del fascismo y del patriarcado. Desenterrar la historia escrita por nuestras compa&ntilde;eras, precursoras de un mundo nuevo, y que su lucha sirva de experiencia, aprendizaje e inspiraci&oacute;n al movimiento feminista actual. Porque fueron somos. Porque somos, ser&aacute;n.</p>
  • <p>El ruido de los cristales rotos se oye por toda la calle. Los escaparates de Oxford Street acaban de estallar. En una acci&oacute;n coordinada, el 1 de marzo de 1912 cientos de sufragistas convergieron en la zona comercial de Londres para hacer saltar por los aires los escaparates de los establecimientos. Una calle cada quince minutos. Cuatrocientos comercios atacados. M&aacute;s que un sabotaje, un acto de guerra. La elecci&oacute;n de los comercios como objetivo del ataque no hab&iacute;a sido casual. La aparici&oacute;n de los grandes almacenes unas d&eacute;cadas antes no s&oacute;lo hab&iacute;a cambiado la geograf&iacute;a de las ciudades, sino tambi&eacute;n los discursos sobre el g&eacute;nero. Sufragistas, dependientas, psiquiatrizadas y ladronas desafiar&aacute;n a la sociedad victoriana y subvertir&aacute;n los roles que les hab&iacute;an sido asignados.</p> <p>Nacho Moreno Segarra nos abre las puertas de los primeros grandes almacenes del siglo XIX para contarnos la historia de las clept&oacute;manas que escond&iacute;an sus peque&ntilde;os hurtos entre los pliegues de su falda, de las dependientas que sufr&iacute;an jornadas interminables de doce horas diarias y eran obligadas a vivir en las dependencias del establecimiento, de las paseantes que miraban los escaparates mientras sufr&iacute;an el acoso callejero de los hombres, de las sufragistas que se reun&iacute;an en los salones de t&eacute; para planear la siguiente acci&oacute;n.</p>
  • Las niñas salvajes es una magnífica novela corta de Ursula K. Le Guin, la historia de dos jóvenes nómadas que son raptadas y esclavizadas en una sociedad de espada y seda.
  • <p>Los medios conservadores presentan a las feministas como mujeres antihombres, siempre enfadadas. Pero muy al contrario, el feminismo ha logrado mejorar la vida de todas las personas. Gracias al feminismo, todos vivimos de forma m&aacute;s igualitaria: en el trabajo y en casa, en nuestras relaciones sociales y sexuales. Gracias al feminismo, la violencia dom&eacute;stica ya no es un secreto, se ha normalizado el uso de anticonceptivos y todos somos un poco m&aacute;s libres.<br /> <br /> No obstante, el feminismo quer&iacute;a mucho m&aacute;s que la igualdad entre hombres y mujeres. Cuando hablaba de hermandad entre mujeres, quer&iacute;a superar las fronteras de clase y raza, transformar el mundo de ra&iacute;z. El feminismo es antirracista, anticlasista y antihom&oacute;fobo o no merece ese nombre. Muchas mujeres blancas hacen uso del feminismo para defender sus intereses pero no mantienen este compromiso con las mujeres negras, precarias y lesbianas; eso no es feminismo.<br /> <br /> Tanto da&ntilde;o hace al movimiento una mujer que reproduce el sexismo como aporta un hombre feminista. El feminismo es para las mujeres y para los hombres. Necesitamos nuevos modelos de masculinidad feminista, de familia y de crianza feminista, de belleza y de sexualidad feminista. Necesitamos un feminismo renovado que explique con palabras sencillas que pretendemos superar el sexismo y colocar el apoyo mutuo en el centro. Eso es el feminismo. Y ese es el objetivo de este libro</p>
  • <p>Fil&oacute;sofas, rebeldes, activistas: este libro gr&aacute;fico cuenta la historia del feminismo en el contexto euro-norteamericano desde la Antig&uuml;edad hasta nuestros d&iacute;as. En sus p&aacute;ginas no s&oacute;lo se abordan sus principales figuras, sino tambi&eacute;n importantes debates feministas,como, por ejemplo, la igualdad de derechos, el trabajo dom&eacute;stico, el amor libre, la identidad y la diferencia, o las principales corrientes en lo relativo al g&eacute;nero, cada uno en su respectivo contexto hist&oacute;rico.</p> <p>De este modo, el lector tendr&aacute; claro que el feminismo no tiene un contenido concreto, establecido, sino que es la contribuci&oacute;n activa de las mujeres a los debates sociales de su tiempo, y que sus temas e inquietudes van cambiando conforme a c&oacute;mo lo hace el propio movimiento femenino. Ya se trate de m&iacute;sticas medievales, fil&oacute;sofas de la Edad Moderna, juristas contempor&aacute;neas o activistas radicales, todas ellas tienen en com&uacute;n su amor por la libertad femenina. Su ejemplo pone de manifiesto que el feminismo no es algo que se pueda &laquo;aprender&raquo;, sino el reto de tener una opini&oacute;n propia y de asumir su responsabilidad. Pero para ello es importante conocer la historia y buscar inspiraci&oacute;n en los debates del pasado.</p>
  • <p>&laquo;Imagina que pudieras escuchar una conversaci&oacute;n entre bell hooks y Stuart Hall sobre feminismo, raza, sexualidad y amor. Con este libro no tenemos que recurrir a nuestra imaginaci&oacute;n. Esta conversaci&oacute;n entre hooks y Hall trata sobre la vida, y est&aacute; llena de ingenio, cordialidad y sabidur&iacute;a. El libro nos da la oportunidad de aprender de dos de los m&aacute;s importantes pensadores cr&iacute;ticos negros de nuestro tiempo.&raquo;</p> <p>Sara Ahmed, autora de <em>Fenomenolog&iacute;a queer</em> i <em>Vivir una vida feminista</em></p> <p>En un encuentro asombroso entre pensadores, los te&oacute;ricos culturales bell hooks y Stuart Hall se re&uacute;nen para entablar una serie de conversaciones sobre temas muy variados que Hall resume en &laquo;vida, amor, muerte y sexo&raquo;. Yendo desde lo trivial hasta lo profundo, atravesando las fronteras de la edad, las sexualidades y los g&eacute;neros, hooks y Hall analizan diversos temas que siguen siendo relevantes hoy en d&iacute;a, como el feminismo, el hogar, el regreso a casa, la clase social, la masculinidad negra, la familia, la pol&iacute;tica, las relaciones y la ense&ntilde;anza. En un di&aacute;logo fluido y sincero, ambos se provocan mutuamente, y tambi&eacute;n provocan a lectores y lectoras; el resultado es un libro que habla del poder de la conversaci&oacute;n como un espacio de pedagog&iacute;a cr&iacute;tica.</p>
  • La semilla

    13,00
    <p>Tanto en la cultura popular como en la actividad pol&iacute;tica, el movimiento feminista, hist&oacute;ricamente, ha dejado a las mujeres inf&eacute;rtiles desamparadas. Este libro atraviesa el fr&iacute;o paisaje del aborto espont&aacute;neo y el dolor particular que se deriva del deseo de formar una familia. Implicada en su propio deseo de tener una criatura, la periodista Alexandra Kimball muestra de forma brillante el dolor y la soledad de la infertilidad, especialmente para una mujer feminista de toda la vida. A partir de su experiencia en los grupos de apoyo en internet sobre la infertilidad, donde las mujeres se re&uacute;nen en foros para hablar sobre la fecundaci&oacute;n in vitro, la subrogaci&oacute;n y el aislamiento, muestra su deseo de que exista una comunidad de mujeres en la vida real que trabaje para combatir el estigma de la infertilidad.</p> <p>Siguiendo la tradici&oacute;n de los libros de Eula Biss, On Immunity y de Barbara Ehrenreich, Bright-sided, Kimball combina un an&aacute;lisis perspicaz con elaborados informes: sus conclusiones muestran las mentiras que subyacen en los enfoques culturales dominantes, a veces parad&oacute;jicos, sobre el derecho de las mujeres a elegir activamente tener criaturas. Combinando la historia feminista, la autobiograf&iacute;a y los informes de quienes est&aacute;n en primera l&iacute;nea en la lucha por los derechos reproductivos y la tecnolog&iacute;a, La semilla promueve en lectores y lectoras el deseo de un mundo en el que ninguna mujer tenga que sentir que su biolog&iacute;a es su destino.</p>
  • <p>&laquo;Imagina que pudieras escuchar una conversaci&oacute;n entre bell hooks y Stuart Hall sobre feminismo, raza, sexualidad y amor. Con este libro no tenemos que recurrir a nuestra imaginaci&oacute;n. Esta conversaci&oacute;n entre hooks y Hall trata sobre la vida, y est&aacute; llena de ingenio, cordialidad y sabidur&iacute;a. El libro nos da la oportunidad de aprender de dos de los m&aacute;s importantes pensadores cr&iacute;ticos negros de nuestro tiempo.&raquo;</p> <p>Sara Ahmed, autora de&nbsp;<em>Fenomenolog&iacute;a queer</em>&nbsp;i&nbsp;<em>Vivir una vida feminista</em></p> <p>En un encuentro asombroso entre pensadores, los te&oacute;ricos culturales bell hooks y Stuart Hall se re&uacute;nen para entablar una serie de conversaciones sobre temas muy variados que Hall resume en &laquo;vida, amor, muerte y sexo&raquo;. Yendo desde lo trivial hasta lo profundo, atravesando las fronteras de la edad, las sexualidades y los g&eacute;neros, hooks y Hall analizan diversos temas que siguen siendo relevantes hoy en d&iacute;a, como el feminismo, el hogar, el regreso a casa, la clase social, la masculinidad negra, la familia, la pol&iacute;tica, las relaciones y la ense&ntilde;anza. En un di&aacute;logo fluido y sincero, ambos se provocan mutuamente, y tambi&eacute;n provocan a lectores y lectoras; el resultado es un libro que habla del poder de la conversaci&oacute;n como un espacio de pedagog&iacute;a cr&iacute;tica.</p>
  • Sin stock
    <p>Los debates en torno a la masculinidad y la creaci&oacute;n de &shy;grupos de hombres, han carecido hasta ahora de una revisi&oacute;n cr&iacute;tica sobre su verdadero alcance transformador. En &shy;Masculinidades y feminismo, se cuestiona la noci&oacute;n, a priori positiva, de nuevas masculinidades. &nbsp;</p> <p>Por lo general, estas se componen de adultos heterosexuales, de clase media blanca y con n&uacute;cleos familiares heteronormativos que, a menudo, excluye a las masculinidades homosexuales, afeminadas, trans*, menores o adolescentes, migrantes, personas mayores o mujeres masculinas. <br /> <br /> En la pr&aacute;ctica, nos encontramos ante grupos autoreferenciales que enfatizan cada vez m&aacute;s la propia identidad masculina, en lugar de ahondar en las relaciones de poder o el di&aacute;logo con el feminismo. Esto muestra c&oacute;mo el hombre sigue vi&eacute;ndose y mir&aacute;ndose como principio y fin, superh&eacute;roe en el campo de la lucha por la igualdad. Asimismo, la ficci&oacute;n entre nueva y vieja masculinidad, sustituye a la comprensi&oacute;n del desarrollo hist&oacute;rico de la dominaci&oacute;n patriarcal por una difusa divisi&oacute;n generacional. <br /> <br /> La supuesta e insuficiente asunci&oacute;n de roles en campos como la paternidad o las tareas dom&eacute;sticas, oculta la profunda desigualdad de g&eacute;nero existente en lo social, y el hecho de que los hombres seguimos monopolizando los espacios de socializaci&oacute;n, sin renunciar a nuestros privilegios en el trabajo, los movimientos sociales, etc. <br /> <br /> La pregunta es si se puede acabar con la desigualdad sin acabar tambi&eacute;n con la masculinidad y, por lo tanto, si esta debe reformarse, transformarse o abolirse.&nbsp;</p>
  • <p>La victimizaci&oacute;n de las mujeres es inseparable del rol hist&oacute;rico que se les ha atribuido en relaci&oacute;n con la violencia. Reducir su papel al de cuidadoras u objetos de protecci&oacute;n por parte de los hombres ha servido para criminalizar y castigar como monstruosa toda desviaci&oacute;n de esa denominada &laquo;condici&oacute;n femenina&raquo;. Mediante la ley y las instituciones, y desde los medios de comunicaci&oacute;n y las propias relaciones sociales, se articula y se transforma una norma de g&eacute;nero que castiga a quienes la transgreden. <em>Putas e insumisas</em> no solo cuestiona este escenario de opresi&oacute;n, sino que reivindica la autonom&iacute;a y la capacidad de autodefensa individual y colectiva, desmitificando la relaci&oacute;n social e imaginaria que dibuja a las mujeres como seres pasivos. Las mujeres recibimos... pero tambi&eacute;n repartimos.</p>
  • <p>&iquest;Es la raza un elemento de la identidad? &iquest;Forma parte la lucha pol&iacute;tica antirracista de las pol&iacute;ticas de la identidad?</p> <p>A trav&eacute;s de investigaciones hist&oacute;ricas, notas autobiogr&aacute;ficas y reflexiones te&oacute;ricas, Haider recorre la reciente historia de las pol&iacute;ticas de la identidad en relaci&oacute;n con la raza para constatar que, a diferencia de su origen emancipador, las pol&iacute;ticas de la identidad se han transformado en un elemento de desactivaci&oacute;n y neutralizaci&oacute;n pol&iacute;tica en manos de las clases dominantes.</p> <p>De una forma provocadora y persuasiva al mismo tiempo, Haider aborda la discusi&oacute;n pol&iacute;tica en torno a las categor&iacute;as de raza y clase. Tambi&eacute;n en un intento de superar los eternos debates en torno a cu&aacute;l de ambas categor&iacute;as es m&aacute;s importante, apela a los ricos legados de la tradici&oacute;n radical negra, los estudios culturales brit&aacute;nicos y los feminismos negros tanto para renovar la cr&iacute;tica a las pol&iacute;ticas de la identidad, como para golpear con su mismo martillo la ceguera euroc&eacute;ntrica y economicista de la tradici&oacute;n marxista. Lo que Haider nos propone es una nueva pr&aacute;ctica pol&iacute;tica que su autor denomina &laquo;universalidad insurgente&raquo;, una pol&iacute;tica de masas, solidaria y transfronteriza que vaya m&aacute;s all&aacute; del chovinismo dalt&oacute;nico y la ideolog&iacute;a de la raza.</p>
  • <p>Este libro ofrece un conjunto de reflexiones que el campo de la salud debe absorber para incidir con conductas que promuevan la autonom&iacute;a y la dignidad. Resulta consternadora la r&eacute;mora de las viejas concepciones acerca de los procesos de salud-enfermedad, la ceguera cognitiva respecto de la generizaci&oacute;n inexorable de tales fen&oacute;menos y, muy especialmente, la recusa de percepci&oacute;n contextual para hacer inteligible el lenguaje del cuerpo que enuncia sus significados contrariando a los presupuestos naturales. A menudo he sostenido una advertencia, y me parece m&aacute;s que adecuado dar la bienvenida a este libro volviendo a ella: para quienes creen a pie juntillas que hay una lectura transparente de los fen&oacute;menos de la naturaleza, es bueno que sepan que la naturaleza no sabe que se llama naturaleza. Su lenguaje es el que hemos inventado, una arbitraria operaci&oacute;n mediadora con la que damos por sentado principios y leyes. Conviene abdicar de su prepotencia, y hacer de la salud un estatuto libertario, tal como emerge como acicate de las p&aacute;ginas de este texto.</p> <p>Art&iacute;culos de Dora Barrancos, Sabrina Bala&ntilde;a, Agostina Finielli, Carla Giuliano, Andrea Paz, Carlos Ram&iacute;rez, Marta Dillon, Moira P&eacute;rez, Laura Contrera, D&eacute;bora Tajer, Luciano Fabbri, Blas Radi, Karina Felitti, Valeria Salech, Violeta Osorio, Julieta Saulo y Ruth Zurbriggen.</p>
  • En Urbanismo feminista se concretan y detallan diferentes aspectos relativos a esa ciudad que pone la vida en el centro, desde la clara conciencia de que solamente los procesos impulsados desde abajo, y a partir de la complejidad comunitaria, edificarán una realidad urbana radicalmente distinta a la que conocemos.
  • <p>Bisexualidades feministas afirma y celebra la identidad bisexual como potencia pol&iacute;tica y activismo identitario. Es un punto de encuentro con una multiplicidad de voces que habilitan y acompa&ntilde;an una construcci&oacute;n propia, &iacute;ntima, y eso sin exagerar, le puede salvar la vida (sexual) a m&aacute;s de una joven y no tan joven. Porque le pone nombre a las identidades er&oacute;ticas y amorosas m&aacute;s all&aacute; de la trama heterosexual, cis y monosexista de la sociedad patriarcal. Asumirse bisexual para quienes llegan a los veinte a&ntilde;os hoy es mucho m&aacute;s pensable que hace una d&eacute;cada. Este libro, con sus textos acad&eacute;micos, activistas y personales, al dotar de palabras, lo har&aacute; m&aacute;s sencillo. Agustina Invernizzi, Iris Luz Ortellao, Josefina Itoiz, Laura Arn&eacute;s, Ayelen Pandolfi Chediac, Malena Correa y Agustina Herrero</p>
  • <p>Aunque en los &uacute;ltimos a&ntilde;os hayan reparado en las mujeres como sujeto hist&oacute;rico, los estudios siguen tentados en presentarlas con un tratamiento victimista. Y ya no se trata de que eso sea falso, que las mujeres -y, en este caso, las trabajadoras- consiguieron victorias, todo lo parciales que se quieran, pero victorias; sino que en estos tiempos tan complicados es necesario recordar que el desarrollo del movimiento feminista se debe gracias a las luchas de nuestras antepasadas que, lejos de limitarse al rol que les confer&iacute;a una sociedad mis&oacute;gina, se batieron por sus derechos, sabiendo movilizarse y organizarse.</p> <p>El presente estudio parte de un marco provinciano -el que ofrece la entonces provincia de Logro&ntilde;o, hoy Comunidad Aut&oacute;noma de La Rioja- con la idea de que son precisamente estos contextos, en los que se supone que nunca pasa nada, los que ofrecen un palco privilegiado para poder apreciar los cambios sociales, pol&iacute;ticos y culturales.</p> <p>Aleix Romero Pe&ntilde;a (Logro&ntilde;o, 1984). Despu&eacute;s de sus estudios secundarios y universitarios, finalizados con Matr&iacute;cula de Honor y Menci&oacute;n Honor&iacute;fica al Mejor Expediente Acad&eacute;mico -Premio Fin de Carrera seg&uacute;n la nomenclatura de la Universidad de La Rioja-, conoci&oacute; algunas de las caras m&aacute;s turbias del mundo acad&eacute;mico mientras cursaba su posgrado. Doctorado finalmente con una tesis que analiza la tantas veces malinterpretada Ilustraci&oacute;n espa&ntilde;ola centr&aacute;ndose en la figura de Mariano Luis de Urquijo (1769-1817), en la actualidad trabaja como profesor interino en distintos institutos riojanos, a la vez que colabora con medios alternativos como El Salto. Cree que la militancia -en su caso, en la Confederaci&oacute;n Nacional del Trabajo- no es &oacute;bice para que un historiador realice un trabajo serio y riguroso, siempre que mantenga una distancia con su tema de estudio y que no trate de enga&ntilde;ar a nadie&quot;.</p>
  • <p>&laquo;&iquest;De qu&eacute; est&aacute;n hechos nuestros cuerpos? &iquest;C&oacute;mo est&aacute;n constituidos? &iquest;Qu&eacute; decir sobre la materia sexual de los mismos? &iquest;Es posible incluir la bio-tecnolog&iacute;a dentro del repertorio de efectos performativos del g&eacute;nero? son algunas de las preguntas-problemas con las que Mart&iacute;n De Mauro introduce el cuerpo en escena, en un contexto singular dominado por la renegociaci&oacute;n de las normativa sexual y gen&eacute;rica. Si en cierto sentido el cuerpo &mdash;expulsado de la historia, contenido como naturaleza&mdash; constituy&oacute; el callej&oacute;n sin salida para la teor&iacute;a feminista, tanto en su versi&oacute;n de la diferencia como el constructivismo social del g&eacute;nero, la muy diseminada recepci&oacute;n de Judith Butler y de Paul B. Preciado torna necesario interceptar la funci&oacute;n narrativa del mismo en sus producciones te&oacute;ricas.&nbsp;</p> <p>Este trabajo introduce, a lo largo de sus p&aacute;ginas, a quienes resisten en los campos de fuerza sexo-gen&eacute;ricos, incluso en t&eacute;rminos de una econom&iacute;a discursiva, tal es el caso de las personas trans e intersex, a menudo tel&oacute;n de fondo de la teor&iacute;a, reducidxs a la l&oacute;gica de la prueba, objeto de la mirada, garantes de la revoluci&oacute;n o contenidxs como apoteosis antinormativa. Entre apertura y cierre del tel&oacute;n asistimos al desplazamiento del cuerpo &mdash;hist&oacute;rico ata&uacute;d sem&aacute;ntico para las categor&iacute;a acabadas&mdash; por el de las t&eacute;cnicas de producci&oacute;n corporal, los efectos perfomativos y la puesta en &oacute;rbita del subtexto cis en ambas cajas de herramientas.</p> <p>La recitaci&oacute;n no-original del g&eacute;nero / el r&eacute;gimen farmacopornogr&aacute;fico / la incorporaci&oacute;n prost&eacute;tica y la matriz heterosexual son algunos de los t&eacute;rminos que parecen derrumbarse unos dentro de otros a lo largo de Cuerpos en escena. Butler y Preciado son compa&ntilde;erxs de cama en este original ensayo interesado por la producci&oacute;n corporal, su siempre inestable articulaci&oacute;n, en un esfuerzo por abrir imaginarios pol&iacute;ticos as&iacute; como atender las modalidades de reontologizaci&oacute;n posesencialista y cancelaci&oacute;n de la voz que dominan buena parte de las teor&iacute;as contempor&aacute;neas organizadas en torno al g&eacute;nero y la sexualidad.&raquo; Emmanuel Theumer</p>
  • <p>Otra subrogaci&oacute;n es posible aborda el pol&eacute;mico tema de la subrogaci&oacute;n gestante, cuyo debate es a&uacute;n incipiente en nuestro pa&iacute;s, desde el marxismo, el feminismo y la teor&iacute;a queer, y lanza un grito radical en favor de la justicia gestacional.</p> <p>Ampliamente documentado, el libro analiza las condiciones materiales en las que actualmente se desarrolla la subrogaci&oacute;n a nivel internacional, y dedica una especial atenci&oacute;n a la prestigiosa cl&iacute;nica Akanksha, fundada y dirigida por la doctora Patel en el estado indio de Guyarat, que en algunas ocasiones ha sido definida como la f&aacute;brica de beb&eacute;s del mundo.</p> <p>Partiendo de la base de que la gestaci&oacute;n y la crianza son siempre un trabajo productivo, y como tal merece ser retribuido, Sophia Lewis defiende la subrogaci&oacute;n sin l&iacute;mites y se muestra cr&iacute;tica con el marco liberal-capitalista en el que se da en la actualidad, cuyas argucias pone al descubierto.</p> <p>Con la subrogaci&oacute;n en el centro, y la gestaci&oacute;n c&iacute;borg como perspectiva, desarma la familia por diversas que sean sus formas, y la concepci&oacute;n tan largamente asentada de que la prole pertenece a quienes comparten su material gen&eacute;tico. La crianza colectiva, sostiene, transformar&aacute; radicalmente las actuales nociones de parentesco y nos ayudar&aacute; a comprender que se necesita a la comunidad entera para criar a un beb&eacute;.</p> <p>Una tesis rompedora que ampl&iacute;a las fronteras del debate y no dejar&aacute; a nadie indiferente.</p>
  • <p>Alex Bleach, vella gl&ograve;ria del rock franc&egrave;s, mor d&rsquo;una sobredosi a la banyera d&rsquo;un hotel. Una desgr&agrave;cia per als seus seguidors, per&ograve; sobretot per a Vernon Subutex. Bleach no nom&eacute;s era el seu amic, tamb&eacute; li pagava el lloguer des del moment que Vernon es va veure obligat a tancar la botiga de discos que regentava. Sense sostre, diners ni fam&iacute;lia, haur&agrave; de sobreviure demanant ajuda als seus antics amics de l&rsquo;&egrave;poca daurada de l&rsquo;underground parisenc.</p> <p>Virginie Despentes ja &eacute;s un dels grans noms de la literatura europea actual. L&rsquo;autora d&rsquo;obres transgressores i censurades com Baise-moi, aix&iacute; com del celebrat manifest feminista Teoria King Kong, ens presenta el primer volum d&rsquo;una trilogia que ha arrasat a Fran&ccedil;a. La hist&ograve;ria d&rsquo;uns personatges rebels i radicals que es menjaven el Par&iacute;s dels anys vuitanta i que en la maduresa s&rsquo;enfronten als efectes nefastos de la crisi social i econ&ograve;mica. Una lectura absorbent, ir&ograve;nica i realista concebuda a boca de can&oacute;. Una aclamada com&egrave;dia humana amb aspecte de thriller que radiografia de forma &agrave;cida i morda&ccedil; la caiguda de l&rsquo;estat del benestar que s&rsquo;est&eacute;n per tot Europa.</p>
  • Desde su publicación en 2018 este libro ha supuesto una auténtica revolución en la comprensión del terror sexual y las narrativas asociadas a la violación como un mecanismo social de disciplinamiento de los cuerpos de las mujeres.
  • <p>El 2 de mayo de 1973, la integrante de los Panteras Negras Assata Shakur se hallaba en el hospital en estado cr&iacute;tico y esposada a la cama, mientras las autoridades locales y la polic&iacute;a federal trataban de interrogarla acerca del tiroteo en una autopista de Nueva Jersey que cost&oacute; la vida a un polic&iacute;a blanco. Objetivo durante mucho tiempo de la campa&ntilde;a de Edgar Hoover para difamar, sabotear y criminalizar las organizaciones nacionalistas negras y a sus l&iacute;deres, Shakur pas&oacute; cuatro a&ntilde;os en la c&aacute;rcel antes de su condena en 1977, sustentada en pruebas poco s&oacute;lidas. Dos a&ntilde;os despu&eacute;s de ser condenada, Assata Shakur escap&oacute; de la c&aacute;rcel y obtuvo asilo pol&iacute;tico en Cuba, donde vive en la actualidad.</p> <p>Esta autobiograf&iacute;a intensamente personal y pol&iacute;tica desmiente la temible imagen de Assata proyectada durante largo tiempo por los medios de comunicaci&oacute;n y el Estado. Con ingenio y candor, relata las experiencias que la llevaron a una vida de activismo, retratando las virtudes, flaquezas y disoluci&oacute;n final de los grupos revolucionarios negros y blancos a manos de agentes del gobierno. El resultado es una notable contribuci&oacute;n a la literatura negra estadounidense, que ya ocupa un lugar junto a la Autobiograf&iacute;a de Malcolm X y a las obras de Maya Angelou.</p>
  • <p>La respuesta pol&iacute;tica al estallido financiero ha vuelto a imponer la prioridad de los mercados sobre la vida. Sin duda, su sostenimiento sigue estando privatizado, invisibilizado, feminizado. A partir de la discusi&oacute;n sobre la econom&iacute;a feminista, este libro detalla las bases de<br /> un sistema injusto e inviable, fundado en la division sexual del trabajo y el expolio del planeta. <br /> <br /> Su prop&oacute;sito consiste en mirar &laquo;m&aacute;s ac&aacute;&raquo; de los mitos del desarrollo (crecimiento ilimitado), la riqueza (acumulaci&oacute;n de capital) y el trabajo (limitado al trabajo asalariado) y a la vez dar cuenta de las tareas, redes y sujetos econ&oacute;micos que, material y cotidianamente, garantizan que la vida siga adelante. En este momento de tr&aacute;nsito, en el que el Estado del bienestar se ha escorado hacia los mercados, esta obra muestra la urgencia de discutir, radical y democr&aacute;ticamente, qu&eacute; vida creemos digna de ser vivida y c&oacute;mo podemos organizarnos para sostenerla de forma colectiva.</p>
  • <p>Publicada en 1974 y escrita cuando ten&iacute;a 28 a&ntilde;os, la autobiograf&iacute;a de Angela Davis es una radiograf&iacute;a fundamental de las luchas sociales en Estados Unidos durante los a&ntilde;os sesenta y setenta, periodo en el que se convirti&oacute; en un icono del Movimiento de Liberaci&oacute;n Negro. En sus p&aacute;ginas, Davis expone el punto de vista de una militante afroamericana y su particular visi&oacute;n del movimiento negro y el feminismo, en uno de los momentos m&aacute;s efervescentes de la historia pol&iacute;tica reciente, cuando el imperialismo norteamericano estaba a la defensiva tanto en el exterior (Vietnam, frentes de liberaci&oacute;n, etc.) como en el interior. Fue en este periodo cuando fue perseguida y encarcelada por diversas autoridades, falsamente acusada de secuestro, conspiraci&oacute;n y asesinato.</p> <p>M&aacute;s que ideas abstractas, teor&iacute;as o ejercicios intelectuales triviales, lo que encontramos en este volumen es una profunda preocupaci&oacute;n por la dignidad de la gente, en un momento hist&oacute;rico en el que la lucha por estos valores se libraba a vida o muerte. Y Davis luch&oacute; por la vida de muchos como si fuera por la suya propia.</p>
  • <p>En &quot;Vivir una vida feminista&quot; Sara Ahmed muestra c&oacute;mo la teor&iacute;a feminista se genera a partir de la vida cotidiana y las experiencias ordinarias de ser feminista. En este texto, Ahmed busca hacer una intervenci&oacute;n sobre el feminismo acad&eacute;mico, al tiempo que tiene un pie fuera de la academia tras su dimisi&oacute;n de Goldsmith College en 2016. Siguiendo el legado feminista negro, ofrece una reflexi&oacute;n po&eacute;tica y personal cr&iacute;tica con el distanciamiento del mundo que se critica, nos llama a nombrar y fijarnos en los problemas, como por ejemplo el acoso sexual, y dar un chasquido feminista que nos gu&iacute;e en la transformaci&oacute;n de este mundo. Tras hacer una fenomenolog&iacute;a queer, cuestionar las miradas reduccionistas del &ldquo;hogar&rdquo;, cuestionar y derribar &ldquo;lo postrracial&rdquo;, y renegar de la &ldquo;felicidad&rdquo; como forma de monitorizar y controlar el sexo y el g&eacute;nero, Ahmed incorpora toda esta experiencia en un libro que se&ntilde;ala y reivindica el papel de la feminista aguafiestas. Nos llama a inventar soluciones creativas, como crear sistemas de apoyo que nos ayuden a sobrevivir a las experiencias devastadoras del racismo y sexismo. Incluye un kit de supervivencia aguafiestas y un manifiesto aguafiestas, que cierran su propuesta y que nos ofrecen herramientas pr&aacute;cticas para vivir una vida feminista, fortaleciendo los lazos entre la teor&iacute;a feminista y vivir una vida feminista.</p>
  • <p>En <em>No al futuro</em>, Edelman insta a las personas queer a abandonar las posiciones c&oacute;modas o integradas, y a asumir la fuerza de una negatividad que &eacute;l vincula con la iron&iacute;a, el goce y, en &uacute;ltima instancia, con la pulsi&oacute;n de muerte.</p> <p>Traducido por Javier S&aacute;ez y Adriana Baschuk Para ilustrar su tesis, Edelman analiza algunos textos cl&aacute;sicos de la literatura, y especialmente dos famosas pel&iacute;culas de Alfred Hitchcock: &quot;Con la muerte en los talones&quot;, donde el s&aacute;dico Leonard pisa la mano que sostiene a la pareja (hetero) que est&aacute; colgando al borde del abismo, y &quot;Los p&aacute;jaros&quot;, con su terror desconcertante y su predilecci&oacute;n por los ni&ntilde;os.&nbsp;</p> <p>Edelman ampl&iacute;a el alcance de la teor&iacute;a psicoanal&iacute;tica contempor&aacute;nea no solo a obras de la literatura y el cine, sino tambi&eacute;n a debates pol&iacute;ticos actuales, como el matrimonio igualitario, la paternidad/maternidad de las personas LGBT y la homofobia de los grupos religiosos integristas.</p>
Ir a Arriba