género

  • <p>Esto no es un libro. Es un interruptor. Un dispositivo que corta la corriente. Y que a la vez permite que algo se ponga en marcha, que algo se encienda. Me gustar&iacute;a que la lectura de este libro supusiera un &laquo;clic&raquo;, un chispazo que interrumpiera una cadencia de mierda, una bajada de tensi&oacute;n en el movimiento LGTBQ que debe terminar cuanto antes. Y que se encendiera otra forma de hacer las cosas y de comportarnos como maricas, lesbianas y trans frente a la sociedad y las propias tendencias involucionistas que anidan entre nosotros. Si esto no pasa, este libro no habr&aacute; funcionado.</p>
  • <p>&laquo;&iquest;De qu&eacute; est&aacute;n hechos nuestros cuerpos? &iquest;C&oacute;mo est&aacute;n constituidos? &iquest;Qu&eacute; decir sobre la materia sexual de los mismos? &iquest;Es posible incluir la bio-tecnolog&iacute;a dentro del repertorio de efectos performativos del g&eacute;nero? son algunas de las preguntas-problemas con las que Mart&iacute;n De Mauro introduce el cuerpo en escena, en un contexto singular dominado por la renegociaci&oacute;n de las normativa sexual y gen&eacute;rica. Si en cierto sentido el cuerpo &mdash;expulsado de la historia, contenido como naturaleza&mdash; constituy&oacute; el callej&oacute;n sin salida para la teor&iacute;a feminista, tanto en su versi&oacute;n de la diferencia como el constructivismo social del g&eacute;nero, la muy diseminada recepci&oacute;n de Judith Butler y de Paul B. Preciado torna necesario interceptar la funci&oacute;n narrativa del mismo en sus producciones te&oacute;ricas.&nbsp;</p> <p>Este trabajo introduce, a lo largo de sus p&aacute;ginas, a quienes resisten en los campos de fuerza sexo-gen&eacute;ricos, incluso en t&eacute;rminos de una econom&iacute;a discursiva, tal es el caso de las personas trans e intersex, a menudo tel&oacute;n de fondo de la teor&iacute;a, reducidxs a la l&oacute;gica de la prueba, objeto de la mirada, garantes de la revoluci&oacute;n o contenidxs como apoteosis antinormativa. Entre apertura y cierre del tel&oacute;n asistimos al desplazamiento del cuerpo &mdash;hist&oacute;rico ata&uacute;d sem&aacute;ntico para las categor&iacute;a acabadas&mdash; por el de las t&eacute;cnicas de producci&oacute;n corporal, los efectos perfomativos y la puesta en &oacute;rbita del subtexto cis en ambas cajas de herramientas.</p> <p>La recitaci&oacute;n no-original del g&eacute;nero / el r&eacute;gimen farmacopornogr&aacute;fico / la incorporaci&oacute;n prost&eacute;tica y la matriz heterosexual son algunos de los t&eacute;rminos que parecen derrumbarse unos dentro de otros a lo largo de Cuerpos en escena. Butler y Preciado son compa&ntilde;erxs de cama en este original ensayo interesado por la producci&oacute;n corporal, su siempre inestable articulaci&oacute;n, en un esfuerzo por abrir imaginarios pol&iacute;ticos as&iacute; como atender las modalidades de reontologizaci&oacute;n posesencialista y cancelaci&oacute;n de la voz que dominan buena parte de las teor&iacute;as contempor&aacute;neas organizadas en torno al g&eacute;nero y la sexualidad.&raquo; Emmanuel Theumer</p>
  • <p>La performatividad es un concepto relativamente reciente. J. L. Austin lo introdujo en la filosof&iacute;a del lenguaje en la d&eacute;cada de los cincuenta para designar aquellas expresiones que, en las circunstancias apropiadas, hacen justo aquello que dicen que hacen (como cuando alguien exclama &laquo;te lo prometo&raquo;). Desde entonces ha sido sometido a intensos procesos de discusi&oacute;n, cr&iacute;tica y resignificaci&oacute;n que lo han conducido a terrenos de reflexi&oacute;n te&oacute;rica, filos&oacute;fica y pol&iacute;tica progresivamente alejados de su contexto originario.&nbsp;&nbsp;</p> <p>Este libro explora, entre todos los trayectos posibles en el interior de estos debates, el modo en que la preocupaci&oacute;n de Austin por comprender c&oacute;mo hacemos cosas con palabras lleg&oacute; a derivar en lo que Judith Butler, como feminista, como fil&oacute;sofa y como te&oacute;rica queer, hace con la performatividad.&nbsp;&nbsp;</p> <p>Con este fin se atiende, en primer lugar, a un contexto geneal&oacute;gico en el que confluyen trabajos y discusiones expl&iacute;citas sobre la performatividad ling&uuml;&iacute;stica (como los de Jacques Derrida, Jonathan Culler o Shoshana Felman) junto a la obra de otros autores que, si bien no la tratan expl&iacute;citamente, hacen posible su particular recepci&oacute;n por parte de Butler, como Michel Foucault.&nbsp;&nbsp;</p> <p>En segundo lugar, se trata de entender la reformulaci&oacute;n de la performatividad en el &aacute;mbito de las identidades sexuales y gen&eacute;ricas, con la que Butler desplaza g&eacute;nero y sexo del conjunto de las cosas que somos al orden de las cosas que hacemos. Las relaciones entre cuerpo y lenguaje, materia y textualidad, sexo y g&eacute;nero sufren as&iacute; una transformaci&oacute;n con efectos de largo alcance sobre la filosof&iacute;a, los estudios de g&eacute;nero y las pol&iacute;ticas identitarias.&nbsp;&nbsp;</p> <p>El intercambio de cr&iacute;ticas entre Butler y autores como Seyla Benhabib, Nancy Fraser o Pierre Bourdieu contribuye a entender parte de esos efectos, y tambi&eacute;n a profundizar en algunas de las prioridades pol&iacute;ticas de nuestra autora: la resistencia a los efectos excluyentes de la normatividad gen&eacute;rica y, en particular, del sistema &laquo;dos sexos, dos g&eacute;neros&raquo;, en direcci&oacute;n a una versi&oacute;n m&aacute;s abierta, inclusiva y proliferante de la identidad.</p>
  • Desde su publicación en 2018 este libro ha supuesto una auténtica revolución en la comprensión del terror sexual y las narrativas asociadas a la violación como un mecanismo social de disciplinamiento de los cuerpos de las mujeres.
  • <p>En <em>No al futuro</em>, Edelman insta a las personas queer a abandonar las posiciones c&oacute;modas o integradas, y a asumir la fuerza de una negatividad que &eacute;l vincula con la iron&iacute;a, el goce y, en &uacute;ltima instancia, con la pulsi&oacute;n de muerte.</p> <p>Traducido por Javier S&aacute;ez y Adriana Baschuk Para ilustrar su tesis, Edelman analiza algunos textos cl&aacute;sicos de la literatura, y especialmente dos famosas pel&iacute;culas de Alfred Hitchcock: &quot;Con la muerte en los talones&quot;, donde el s&aacute;dico Leonard pisa la mano que sostiene a la pareja (hetero) que est&aacute; colgando al borde del abismo, y &quot;Los p&aacute;jaros&quot;, con su terror desconcertante y su predilecci&oacute;n por los ni&ntilde;os.&nbsp;</p> <p>Edelman ampl&iacute;a el alcance de la teor&iacute;a psicoanal&iacute;tica contempor&aacute;nea no solo a obras de la literatura y el cine, sino tambi&eacute;n a debates pol&iacute;ticos actuales, como el matrimonio igualitario, la paternidad/maternidad de las personas LGBT y la homofobia de los grupos religiosos integristas.</p>
  • <p>La Escuela de Fr&aacute;ncfort, la reflexi&oacute;n feminista, Gilles Deleuze y F&eacute;lix Guattari, adem&aacute;s de Michel Foucault: hace mucho tiempo que la filosof&iacute;a comprende cu&aacute;nto es pol&iacute;ticamente significativo el sexo y cu&aacute;nto la modernidad occidental, en cambio, ha tratado de ocultar las diferencias sexuales bajo el principio de igualdad de todos los individuos frente a la ley. Habiendo surgido del doble trauma de la ca&iacute;da del muro de Berl&iacute;n y de la crisis del SIDA, las teor&iacute;as tratan de explicar en qu&eacute; medida la mera existencia de lesbianas, gais, bisexuales, transexuales, transg&eacute;nero, intersexuales y asexuales representa un reto al liberalismo. Sin embargo, en el vigoroso florecimiento que el queer ha tenido en Italia durante los &uacute;ltimos a&ntilde;os, lo que ha prevalecido ha sido una versi&oacute;n progresista y tranquilizadora de estas tem&aacute;ticas, derivadas especialmente del pensamiento de Michel Foucault y de Judith Butler y del di&aacute;logo entre el lesbofeminismo europeo y los estudios de g&eacute;nero estadounidenses. Queda todav&iacute;a en la sombra la corriente antisocial de las teor&iacute;as queer, desarrollada sobre todo por pensadores gais como Leo Bersani y Lee Edelman, quienes, m&aacute;s que hacer de lo &laquo;sexual&raquo; una instancia de emancipaci&oacute;n pol&iacute;tica, insisten acerca de las perturbadoras relaciones que estos entretejen con la pulsi&oacute;n de muerte, auguran la supresi&oacute;n del sujeto pol&iacute;tico en el gozo y son partidarios del fin de la civilizaci&oacute;n.</p> <p>Con el intento de colmar una laguna, este libro discute cr&iacute;ticamente el declive &laquo;apocal&iacute;ptico&raquo; del queer, halla las premisas en la contestaci&oacute;n de los a&ntilde;os setenta (Guy Hocquenghem, Mario Mieli) y pone de relieve la radicalidad sobre el paisaje de fondo de la filosof&iacute;a pol&iacute;tica cl&aacute;sica de la modernidad (Thomas Hobbes, Immanuel Kant). Para suministrar una puesta en escena figurada del ataque que las existencias sexuales fuera de la norma representan para el imaginario pol&iacute;tico contempor&aacute;neo, el autor llama a la causa a los zombis gais del cine de Bruce LaBruce: &laquo;Cuando ya no quede sitio en el infierno, los muertos caminaremos por la tierra&hellip;&raquo;.</p>
  • <p>Gays y lesbianas han logrado cotas de igualdad hasta hace poco inimaginables. Ha llegado el momento de preguntarse cu&aacute;les han sido los peajes que se han pagado para llegar a ella y a qui&eacute;n se ha dejado por el camino. El autor concluye que el precio a pagar por la integraci&oacute;n ha sido presentarse como fieles seguidores del g&eacute;nero normativo, convencer de que se trata de grupos espec&iacute;ficos cuyas demandas no cuestionan el orden social y apelar a la falta de agencia, argumentando que no han podido hacer nada para remediar su homosexualidad.</p> <p>Por el camino se ha tratado de esconder a los gays afeminados y a lesbianas &lsquo;demasiado&rsquo; masculinas, y se ha dejado atr&aacute;s a las personas trans, considerando que daban mala imagen al colectivo. De hecho, se puede sostener que lesbianas y gays han conseguido el reconocimiento social a costa del colectivo trans, que contin&uacute;a patologizado y estigmatizado.</p> <p>El libro se basa en el an&aacute;lisis de los discursos en torno a la homosexualidad y la transexualidad de la religi&oacute;n, la ciencia, la pol&iacute;tica, el activismo LGTB y de personas lesbianas, gays y trans. Estos discursos se van entretejiendo, formando un panorama complejo, lleno de ambivalencias y paradojas en el marco del cual trans, gays y lesbianas tratan de buscar sentido a sus vidas y encontrar una voz propia.</p> <p>&laquo;Se trata de un excelente ejemplo de proyecto de investigaci&oacute;n en el que hay una continua y s&oacute;lida interacci&oacute;n entre la exploraci&oacute;n te&oacute;rica y la investigaci&oacute;n aplicada, de forma que una enriquece y refuerza la otra. El resultado es un libro genuino y que supone una contribuci&oacute;n significativa al conocimiento sobre los significados y la situaci&oacute;n de la diferencia sexual en el mundo contempor&aacute;neo.&raquo;</p> <p>Jeffrey Weeks, El malestar de la sexualidad</p>
  • Tránsito

    20,00
    <p>Cuando una persona rompe con las estructuras internas con las que concibe su identidad, g&eacute;nero y sexo, un mundo nuevo aparece y la vida se llena de posibilidades infinitas.</p> <p>Merche transita por nuevos senderos y en su caminar encontrar&aacute; personas que le mostrar&aacute;n realidades que nunca antes hubiese imaginado.</p>
  • <p>El objeto de este libro es claro: la sociedad capitalista. Se trata de comprender qu&eacute; es y c&oacute;mo funciona; sus irracionalidades, coerciones e injusticias end&oacute;genas; sus tendencias inherentes a la crisis y sus l&iacute;neas de conflicto; sus potenciales inmanentes para la transformaci&oacute;n. Partiendo libre y ecl&eacute;cticamente de &laquo;los dos Karls&raquo; (Marx y Polanyi), as&iacute; como de las teor&iacute;as feministas y ecologistas y de las teor&iacute;as cr&iacute;ticas de la raza, este libro propone una visi&oacute;n ampliada de la sociedad capitalista. Esta visi&oacute;n abarca no solo la econom&iacute;a visible, &laquo;productiva&raquo;, sino tambi&eacute;n los &laquo;talleres ocultos&raquo;, las condiciones de posibilidad subyacentes de esta &uacute;ltima, en concreto: los procesos de reproducci&oacute;n social asim&eacute;tricos en cuanto al g&eacute;nero, la din&aacute;mica racializada de la expropiaci&oacute;n, las formas de dominio pol&iacute;tico estructuradas por las diferencias de clase, as&iacute; como la depredaci&oacute;n sistem&aacute;tica de los ecosistemas. Todo ello es parte integrante esencial de lo que es, en realidad, una sociedad capitalista.</p> <p>Una visi&oacute;n ampliada del capitalismo implica tambi&eacute;n una visi&oacute;n ampliada del socialismo. Desde esta perspectiva, el socialismo debe superar no solo la explotaci&oacute;n del trabajo asalariado por parte del capital, sino tambi&eacute;n sus m&uacute;ltiples formas alternativas de explotaci&oacute;n parasitaria: el trabajo de cuidados no remunerado, los bienes p&uacute;blicos y la riqueza expropiada a los sujetos racializados y a la naturaleza no humana. El socialismo debe ser, pues, feminista, antirracista y antiimperialista, ecosostenible y democr&aacute;tico.</p>
  • <p>Este libro, procedente de una de las voces m&aacute;s destacadas y reconocidas del activismo trans y del feminismo estadounidense, Julia Serano, contribuye a paliar la ausencia y la desatenci&oacute;n de las mujeres trans en el movimiento feminista. Desde una perspectiva transfemenina, la autora analiza cuestiones como el sexo, el g&eacute;nero y la identidad, el sexismo, el travestismo o el &ldquo;privilegio masculino&ldquo;, as&iacute; como la transfobia y la transmisoginia, entre otros tantas otras. Ofrece una descripci&oacute;n comprensiva e imprescindible sobre lo que significa ser una mujer trans dentro de una sociedad patriarcal, y sobre qu&eacute; es una vida trans como tal. Whipping Girl es un texto necesario, una referencia ineludible que nace en el activismo trans estadounidense y que atraviesa todo el pensamiento feminista. Este libro muestra que sin el reconocimiento de la comunidad trans, a veces olvidado en el movimiento feminista y siempre en el sistema cisheteronormativo y patriarcal, no habr&aacute; justicia.</p>
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