<p>Esta obra trata una cuesti&oacute;n que no por intuida es m&aacute;s conocida: la emergencia de una nueva juventud &aacute;rabe, impregnada de valores liberales y democr&aacute;ticos, muchas veces laica y relacionada con Occidente y acostumbrada a usar los nuevos medios electr&oacute;nicos como instrumento de relaci&oacute;n o de exposici&oacute;n de ideas. Se trata de una juventud urbana o urbanizada, empujada por el malestar social y econ&oacute;mico y, sobre todo, por el descubrimiento de nuevas expectativas vitales, a adoptar un compromiso solidario con sus compa&ntilde;eros de generaci&oacute;n frente a unos reg&iacute;menes mediocres y brutales cuyo &uacute;nico inter&eacute;s era perpetuarse y perpetuar el sistema de expolio social en que basaba su poder.</p> <p>Cole, a trav&eacute;s de su experiencia directa, centrada en tres pa&iacute;ses, Egipto, T&uacute;nez y Libia, muestra la vida p&uacute;blica de estas redes juveniles, que tuvieron el mayor desarrollo en los dos primeros: c&oacute;mo surgen, se establecen y se convierten en instrumentos de transformaci&oacute;n; narra sus luchas, su esfuerzo para impedir que aquellos poderes que lograron poner en jaque se recompusieran. Narra, en fin, sus fragilidades, sus divisiones, m&aacute;s graves cuantos m&aacute;s objetivos lograban, y sus desilusiones. Un cuadro cuyos limitados resultados no ocultan todo lo que han ense&ntilde;ado y, sobre todo, el potencial de futuro que encarnan.</p> <p>Al hacer hincapi&eacute; en la existencia de una juventud que en sus valores, formas de vida e incluso carencia de perspectivas es perfectamente homologable con la juventud de otras partes del mundo, incluido el presuntamente desarrollado, Juan Cole ofrece al lector no &aacute;rabe una inapreciable lecci&oacute;n: mostrar que el papel creador de la voluntad de cambio puede en muchas ocasiones derribar las barreras de la rutina ideol&oacute;gica y social.</p>