Cultura Libre y Ciberactivismo

  • <p>El transhumanismo es un movimiento cuyo objetivo es utilizar la tecnolog&iacute;a para cambiar la condici&oacute;n humana, mejorando nuestros cuerpos y mentes hasta convertirnos en otra cosa mejor que los animales que somos. Una filosof&iacute;a que, seg&uacute;n c&oacute;mo se mire, puede parecer esperanzadora, terror&iacute;fica o absurda. Entre sus partidarios est&aacute;n algunos de los nombres m&aacute;s destacados de Silicon Valley, como Peter Thiel, Elon Musk o Ray Kurzweil. El periodista Mark O&rsquo;Connell explora las asombrosas &mdash;y aterradoras&mdash; posibilidades que se presentan cuando se piensa que nuestro cuerpo es un dispositivo anticuado. Visita la instalaci&oacute;n de criopreservaci&oacute;n m&aacute;s importante del mundo, descubre un colectivo de biohackers que refuerza sus sentidos mediante la implantaci&oacute;n de dispositivos electr&oacute;nicos bajo la piel y se re&uacute;ne con miembros de un equipo que investiga c&oacute;mo proteger a la humanidad de la superinteligencia artificial&hellip; C&oacute;mo ser una m&aacute;quina nos presenta la primera exploraci&oacute;n completa del transhumanismo: sus ra&iacute;ces filos&oacute;ficas y cient&iacute;ficas, sus actores clave y posibles futuros. Pero tambi&eacute;n es una sorprendente meditaci&oacute;n sobre lo que significa ser humano, un v&iacute;vido retrato de la excentricidad humana y una importante reflexi&oacute;n acerca del deseo inmemorial de trascender los hechos b&aacute;sicos de nuestra existencia, un deseo que es tan antiguo como las religiones.</p>
  • <p>Mitnick fue el <em>hacker</em> m&aacute;s escurridizo de la historia. Logr&oacute; colarse en ordenadores y redes de las agencias y compa&ntilde;&iacute;as m&aacute;s grandes del mundo, aparentemente impenetrables, como Motorola, Sun Microsystems o Pacific Bell. Para Kevin, hackear no iba solo de alcanzar avances tecnol&oacute;gicos: era un juego de confianza que requer&iacute;a burlar y confundir para acceder a informaci&oacute;n valiosa. Impulsado por un fuerte est&iacute;mulo para lograr lo imposible, enga&ntilde;ando a los empleados para obtener informaci&oacute;n privada y maniobrando a trav&eacute;s de capas de seguridad, obtuvo acceso a datos que nadie pod&iacute;a ver. Cuando el FBI comenz&oacute; a acecharle, Kevin se dio a la fuga, en un juego de persecuci&oacute;n cada vez m&aacute;s sofisticado, que le llev&oacute; a adoptar identidades falsas y muchos cambios de aspecto, a pasar temporadas en una gran cantidad de ciudades y a un enfrentamiento final con los federales, que no parar&iacute;an hasta derribarlo. Una emocionante historia real de intriga, suspense e incre&iacute;ble evasi&oacute;n, y el retrato de un visionario cuya creatividad, habilidad y persistencia obligaron a las autoridades a replantearse la forma en que lo persegu&iacute;an, inspirando cambios permanentes en el modo en que las personas y las empresas protegen su informaci&oacute;n m&aacute;s confidencial.</p>
  • <p>Este libro comparte algunas preguntas y reflexiones sobre el papel de la cultura en un momento pol&iacute;tico tan fren&eacute;tico como incierto. &iquest;Puede la efervescencia cultural que se gener&oacute; en torno al 15M traducirse en un nuevo marco institucional? &iquest;Puede la cultura libre informar las pol&iacute;ticas p&uacute;blicas? &iquest;Debe hacerlo? Las pol&iacute;ticas culturales se encuentran en una dif&iacute;cil coyuntura: tienen que ser capaces de dar cuenta del cambio que recorre la sociedad y de dar cabida a nuevas pr&aacute;cticas y formas de vida. La ciudadan&iacute;a exige cada vez m&aacute;s instituciones abiertas, transparentes y accesibles. Desde distintos lugares se est&aacute; desbordando el acotado campo del sector de la cultura, exigiendo nuevas modalidades de interlocuci&oacute;n con las administraciones. Desde &aacute;mbitos aut&oacute;nomos y desde las pr&aacute;cticas cr&iacute;ticas se apuntan formas nuevas de entender lo que podr&iacute;a ser una cultura del com&uacute;n. Y sin embargo los nuevos partidos parecen sentirse inc&oacute;modos, desbordados con la gesti&oacute;n de la cultura. &iquest;Es posible pensar en pol&iacute;ticas culturales de corte materialista y con vocaci&oacute;n de transformaci&oacute;n? &iquest;Puede lo p&uacute;blico aceptar y cohabitar con lo com&uacute;n? &iquest;Tiene sentido plantearnos una cultura libre de Estado?</p>
  • <p>Este libro reflexiona sobre la premisa de que el conocimiento es en la actualidad uno de los principales flujos de producci&oacute;n de valor, innovaci&oacute;n social e imaginaci&oacute;n pol&iacute;tica y que su circulaci&oacute;n es por primera vez en la historia potencialmente universal, gracias a las posibilidades ofrecidas por las nuevas tecnolog&iacute;as. A partir de esta constataci&oacute;n, diversos autores y autoras analizan en un conjunto de magn&iacute;ficas contribuciones los problemas y las posibilidades que rodean al conocimiento entendido como un nuevo bien com&uacute;n en la era digital, que, sin embargo, opera en una econom&iacute;a guiada por el beneficio y la apropiaci&oacute;n privada de las externalidades sociales generadas colectivamente. Si el conocimiento es un flujo por definici&oacute;n producido colectivamente y si la producci&oacute;n de valor e innovaci&oacute;n social han dejado de responder a la l&oacute;gica de la acumulaci&oacute;n de capital por los propietarios de los medios de producci&oacute;n social, entonces el estatuto del conocimiento, de su circulaci&oacute;n y de su apropiaci&oacute;n colectiva debe ser reconsiderado y su uso social dotado de otro marco legal, econ&oacute;mico e institucional organizado mediante un criterio de libre acceso y circulaci&oacute;n irrestricta. Frente a este contexto, el libro analiza tanto las fuertes tendencias al cercamiento privado de estos nuevos commons como las innumerables iniciativas y las posibilidades ofrecidas por las nuevas tecnolog&iacute;as y las nuevas redes globales para compartir el conocimiento com&uacute;n en el horizonte de un proyecto de sociedad radicalmente igualitaria y democr&aacute;tica.</p>
  • <p>Las licencias Creative Commons y la filosof&iacute;a del copyleft fueron el resultado del primer movimiento social generado en torno a la propiedad intelectual. El software libre goza de buena salud, pero la cultura libre no. Las diferencias entre c&oacute;digo y libros, canciones y pel&iacute;culas son cada vez m&aacute;s evidentes, pero se sigue insistiendo en que el uso de las Creative Commons, por s&iacute; solas, van a acabar con la precariedad y con los abusos de la industria.</p> <p>A pesar de las simpat&iacute;as que genera en algunos sectores de la izquierda la cultura libre presenta por desgracia m&aacute;s que sospechosos parecidos de familia con la agenda neoliberal. &laquo;Muy pocas alternativas a la propiedad intelectual convencional han integrado en sus proyectos alguna clase de cr&iacute;tica del mercado de trabajo, una redefinici&oacute;n de la categor&iacute;a de trabajador intelectual, una soluci&oacute;n viable para las tareas de mediaci&oacute;n, formas de retribuci&oacute;n justa de actividades art&iacute;stico-culturales o, incluso, alguna clase de complicidad con proyectos pol&iacute;ticos antagonistas m&aacute;s amplios. La opci&oacute;n mayoritaria ha sido dejar esas cuestiones abandonadas a la espontaneidad de la red, como antes el liberalismo propuso abandonarlas a la espontaneidad del mercado&raquo;. (del pr&oacute;logo de C. Rendueles e I. S&aacute;bada).</p> <p>M&aacute;s que nuevos tipos de licencias son necesarias instancias colectivas para la gesti&oacute;n de la propiedad intelectual y derechos de autor. Necesitamos sindicatos en el &aacute;mbito de la cultura. Este libro es un modesto intento para empezar a sentar las bases hist&oacute;ricas, ideol&oacute;gicas y discursivas para ese proceso.</p>
  • <p>Los representantes de las grandes corporaciones y de las industrias culturales hablan del modelo comercial, que durante el &uacute;ltimo siglo ha hegemonizado las formas de producci&oacute;n intelectual y creaci&oacute;n cultural, como si se tratara de un ecosistema cerrado que habr&iacute;a llegado a nuestros d&iacute;as de forma arm&oacute;nica y desconflictivizada. Seg&uacute;n esta lectura, ese supuesto orden natural, basado en los t&iacute;tulos de propiedad sobre obras fruto de procesos creativos y de investigaci&oacute;n, se ver&iacute;a hoy amenazado por la irrupci&oacute;n de internet y de la cultura de la descarga y el intercambio asociada a &eacute;sta.</p> <p>Pero, como muestra <em>La tragedia del copyright</em>, &eacute;ste ha sido siempre un terreno de conflicto que afecta a bienes comunes en campos tan diversos como la ciencia, la agricultura, la producci&oacute;n art&iacute;stica o la cultura popular. La historia del <em>copyright</em> y de los derechos de autor est&aacute; estrechamente asociada a los procesos de desposesi&oacute;n, apropiaci&oacute;n, privatizaci&oacute;n y comercializaci&oacute;n del conocimiento y la cultura, que han afectado tanto a la sabidur&iacute;a ancestral de comunidades ind&iacute;genas como a quienes han dedicado su vida a la creaci&oacute;n. El inter&eacute;s por la explotaci&oacute;n comercial de los saberes ha estado en tensi&oacute;n permanente con el dominio p&uacute;blico, el acceso abierto al conocimiento y, en &uacute;ltima instancia, con los modelos de cooperaci&oacute;n no basados en la competencia.</p> <p>Esta lucha entre lo com&uacute;n y su privatizaci&oacute;n se encuentra hoy ante una crisis de modelo, consecuencia de diferentes factores: el paso a un segundo plano de la copia f&iacute;sica; la construcci&oacute;n de estructuras de intercambio no basadas en la compra-venta; la disoluci&oacute;n de los viejos roles comerciales en un terreno en el que un mismo sujeto puede crear, producir, distribuir o consumir; o la constituci&oacute;n de &laquo;empresas del procom&uacute;n&raquo; que sit&uacute;an el conocimiento entre los bienes comunes y cuestionan el concepto mismo de propiedad intelectual. Realidades que tambi&eacute;n intentan captar y de las que se intentan apropiar los aparatos industriales pero que, en cualquier caso, dibujan un nuevo terreno de juego y de conflicto.</p> <p>&nbsp;</p> <p><a target="_blank" href="http://www.viruseditorial.net/file/mailing-la-tragedia-del-copyright.pdf">Ficha</a></p>
  • Piratería

    25,00
    <p>Desde la aparici&oacute;n de Napster y otros servicios para compartir archivos a trav&eacute;s de internet, los famosos P2P, la mayor&iacute;a de la poblaci&oacute;n ha asumido que la pirater&iacute;a intelectual es un producto de la era digital, una amenaza a la expresi&oacute;n creativa como nunca antes ha existido. La primera d&eacute;cada del siglo XXI ha visto c&oacute;mo la industria cultural de todo el mundo se enfrentaba con una forma de pirater&iacute;a intelectual que no entend&iacute;a de fronteras y que no parec&iacute;a, ni parece hoy, poder ser controlada.</p> <p>Sin embargo, tal y como Adrian Johns muestra, la pirater&iacute;a intelectual tiene una larga historia. Esta obra explora las numerosas guerras de la propiedad intelectual desde el advenimiento de la cultura de la imprenta en el siglo XV hasta el reinado de internet el siglo XXI. Del papel al archivo digital. Su historia no solo es la de los piratas y ladrones, personajes en no pocas ocasiones dotados de ingenio y buenas intenciones, sino tambi&eacute;n la de las v&iacute;ctimas, de Charles Dickens a Bob Dylan.&nbsp;</p> <p>Rebosante de informaci&oacute;n, su certero an&aacute;lisis permite al lector afrontar las implicaciones de la historia de la pirater&iacute;a intelectual en el momento presente, analizando los debates sobre el acceso abierto a la informaci&oacute;n y la cultura en internet, el reparto justo de retribuciones econ&oacute;micas y la cultura libre en las redes sociales en una perspectiva hist&oacute;rica notablemente m&aacute;s amplia que lo que tradicionalmente es considerada. En &uacute;ltima instancia, el autor sostiene que la pirater&iacute;a siempre ha estado en el centro de nuestros esfuerzos por reconciliar a la creatividad y el comercio cultural, siendo un motor fundamental en el desarrollo de innovaciones sociales, tecnol&oacute;gicas e intelectuales a la altura, en no pocas ocasiones, de su propio adversario.</p> <p class="MsoNormal" style="margin: 6pt 0cm;"><span style="font-size: small;">De Cervantes a Bono, de Mar&iacute;a Callas a Microsoft o Google, ning&uacute;n cap&iacute;tulo en la historia de la pirater&iacute;a intelectual evade el inteligente an&aacute;lisis de Adrian Johns en lo que ser&aacute; la historia definitiva de este pol&eacute;mico aspecto de nuestra historia cultural.&nbsp;</span></p> <div>&nbsp;</div>
  • <p>Pocas dudas caben ya de que Internet se ha convertido en un terreno de batalla crucial para el futuro del desarrollo de la cr&iacute;tica, la transformaci&oacute;n y los propios movimientos sociales. A partir de algunas de las principales propuestas ciberactivistas que se han desarrollado en los &uacute;ltimos a&ntilde;os como WikiLeaks, Anonymus o Hacktivistas, este libro apuesta por la libertad en Internet, la lucha contra la censura y la falsa escasez de los bienes inmateriales.</p> <p>Su propio mimetismo con la l&oacute;gica de la Red (abierta, distribuida, flexible), les ha permitido aportar nuevas herramientas, m&eacute;todos novedosos y elementos de organizaci&oacute;n originales que resultan cada vez m&aacute;s imprescindibles ya no s&oacute;lo para las luchas en Internet, sino tambi&eacute;n para todos aqu&eacute;llos que tratan de afrontar eficazmente la transformaci&oacute;n de las democracias capitalistas tard&iacute;as.</p>
  • <p>El desaf&iacute;o de esta obra es pensar la cibercultura. &iquest;Qu&eacute; es la cibercultura? &iquest;Qu&eacute; movimiento social y cultural se esconde tras este fen&oacute;meno t&eacute;cnico? &iquest;Podemos hablar de una nueva relaci&oacute;n con el saber? &iquest;Qu&eacute; cambios comporta la cibercultura en la educaci&oacute;n y en la formaci&oacute;n? &iquest;Cu&aacute;les son las nuevas formas art&iacute;sticas ligadas a los ordenadores y a las redes? El urbanismo y la organizaci&oacute;n del territorio, &iquest;c&oacute;mo se ven afectados por el desarrollo del ciberespacio? En una palabra, &iquest;cu&aacute;les son las implicaciones culturales de las nuevas tecnolog&iacute;as? Una obra clave para introducirnos en la cultura de la sociedad digital.</p> <p>&nbsp;</p>
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