<p>«Esta obra que presenta Alicia Alonso, tiene que ser leída en muchos ámbitos distintos: sociales, políticos, académicos, periodísticos, divulgativos. Es una obra que inscribe en esa grieta que sabe separar muy bien lo que es una supuesta “cárcel legal” (propia de un universo prescriptivo o del “deber ser”) de la “cárcel real”: la que cotidianamente alberga la pobreza, las enfermedades, las exclusiones del proyecto de explotación y dominio que se nos presenta como expresión del progreso contemporáneo. Quienes quieran adentrarse en ese mundo olvidado y no seguir siendo indiferentes, tienen aquí un material imprescindible para una lectura que convoca a la reflexión, pero también a la acción.» <br />
—Iñaki Rivera Beiras</p>
<p>«El feminismo de la autora nos advierte de la afinidad entre la cultura del castigo y el patriarcado. [...] Inspirada por las corrientes feministas surgidas en América Latina, Alicia Alonso Merino se posiciona en la periferia, rompe con el eurocentrismo de pretensiones universales y opta por la interseccionalidad entre sexo/género, clase y “raza”. [...] Son por tanto numerosas las razones para un feminismo no punitivista, un feminismo que no desprecie la vida sistemáticamente, un feminismo que no genere víctimas infantilizadas, un feminismo que, en consecuencia, abogue por la abolición no sólo de la prisión, sino de la pena.»<br />
—Ana Gordaliza)</p>