<p>La ense&ntilde;anza y la pr&aacute;ctica de la psicolog&iacute;a se caracterizan por la ausencia tanto de aut&eacute;nticas reflexiones epistemol&oacute;gicas como de las cr&iacute;ticas pertinentes a las desgraciadas repercusiones de car&aacute;cter &eacute;tico y sociopol&iacute;tico que de ellas se derivan. Las praxis y teor&iacute;as psicol&oacute;gicas dominantes parecen poner su mayor empe&ntilde;o en disputarse ante el sistema pol&iacute;tico-econ&oacute;mico el papel de su m&aacute;s fiel servidor, pugnando gremialmente entre s&iacute; por convencerle de qui&eacute;n puede ofrecerle los procesos alienantes y encubridores m&aacute;s rentables y efectivos.</p>