<p>Desde la sexta d&eacute;cada del siglo XVIII el az&uacute;car hizo su irrupci&oacute;n en la localidad cubana de Trinidad; en la &uacute;ltima d&eacute;cada del mismo siglo se consolid&oacute; como actividad econ&oacute;mica fundamental. El contexto geopol&iacute;tico as&iacute; como las particularidades del territorio, en especial su ubicaci&oacute;n geogr&aacute;fica, permitieron que encontrara en las relaciones con sus vecinos caribe&ntilde;os los medios para hacerse del capital necesario para desarrollar su econom&iacute;a. Las caracter&iacute;sticas y el auge de la actividad azucarera, mantenido hasta 1848, fueron el resultado de la combinaci&oacute;n y adaptaci&oacute;n de factores como: el contrabando, la tierra, la fuerza de trabajo (esclava), la tecnolog&iacute;a y las relaciones comerciales, a los cambios impuestos por la irreversible transici&oacute;n hacia el naciente capitalismo.</p>