<p>Existe un amplio consenso en todos los &oacute;rdenes sociales sobre que la introducci&oacute;n de la innovaci&oacute;n en la econom&iacute;a es absolutamente necesaria para conseguir un tipo de crecimiento sostenible basado en ventajas competitivas, que no dependa exclusivamente de la rebaja de costes. De ello parece desprenderse la existencia de un concepto mayoritariamente asumido de ella, al objeto de sumar adhesiones y facilitar apoyos necesarios (p&uacute;blicos, privados y mixtos). No obstante, y a pesar de ser lo deseable, no ocurre as&iacute; tal como se ha demostrado mediante la investigaci&oacute;n que hemos llevado a cabo sobre este particular. Conclusi&oacute;n a la que hemos llegado al analizar el papel que juegan las competencias de innovaci&oacute;n en el entorno institucional de las relaciones entre centros de Formaci&oacute;n Profesional y de trabajo en Catalu&ntilde;a, en los que podemos observar la presencia de dos modos diferentes de de&#64257; nirla. Por un lado, nos encontramos con los defensores de una orientaci&oacute;n de clara ascendencia neo-schumpeteriana (la empresa privada la &uacute;nica que innova); por otro, los que promueven un concepto m&aacute;s integrador, en el que los aspectos sociales adquieren mayor importancia. Este libro se&ntilde;ala esa distancia conceptual, as&iacute; como tratar de explicar su porqu&eacute;, profundizando en sus distintas dimensiones.</p>