<p>Escritor e ilustrador de m&aacute;s de un centenar de libros, Edward Gorey es un personaje de culto entre numerosos y fieles admiradores de todo el mundo, como el propio Tim Burton. Su personalidad estrafalaria contribuy&oacute; a construir una obra extra&ntilde;a e inclasificable con obras capitales como el tr&iacute;ptico memorable <em>La f&aacute;brica de vinagre</em> (Libros del Zorro Rojo, 2010).</p> <p><em>La biblioteca macabra</em> re&uacute;ne, por primera vez en un &uacute;nico estuche, cinco libros de su autor&iacute;a: <em>La ni&ntilde;a desdichada</em>, que narra la funesta vida de Charlotte Sophia; <em>La procaz intimaci&oacute;n</em>, la historia de una se&ntilde;orita endemoniada; <em>El zoo absoluto</em>, una colecci&oacute;n de animales m&aacute;s que ex&oacute;tica; <em>El jard&iacute;n mal&eacute;fico</em>, en el que quedar&aacute; atrapada toda la familia y <em>Los peque&ntilde;os macabros</em>, un muestrario alfab&eacute;tico de muertes tr&aacute;gicas infantiles, su obra maestra.</p> <p>Su estilo gr&aacute;fico victoriano, cargado de elementos g&oacute;ticos, as&iacute; como el sublime manejo de las texturas y los grises le aportan una impronta &uacute;nica a su obra tenebrosa, por momentos surrealista.</p> <p>&laquo;Los surrealistas pensaban que no hab&iacute;a nada m&aacute;s misterioso que la vida cotidiana. Estoy de acuerdo. La vida cotidiana es muy desconcertante.&raquo; &mdash;Edward Gorey&nbsp;</p>