Marx

  • <p>Es hablar de Friedrich Engels (1820 - 1895) y pensar de inmediato en Karl Marx. Lo contrario apenas ocurre. Aunque el propio Engels se describi&oacute; como &laquo;segundo viol&iacute;n&raquo;, no cabe subestimar su influencia en la vida y obra de Marx.</p> <p>En el marxismo-leninismo, estos viejos amigos, Marx y Engels, se convirtieron en una suerte de Jano. Pero la criatura bic&eacute;fala de la mitolog&iacute;a de los partidos marxistas nunca existi&oacute;. Engels desempe&ntilde;&oacute; su propio papel, &uacute;nico e influyente. Lo que est&aacute; fuera de duda es que sin Engels nunca hubiera existido Marx.</p> <p>Kr&auml;tke nos acerca a la figura singular del magnate del algod&oacute;n convertido en enterrador de la clase que le vio nacer haciendo un repaso de los principales elementos creativos que Engels introdujo en el pensamiento contempor&aacute;neo, as&iacute; como en el movimiento socialista&nbsp; internacional. Un libro clave para entender esta figura en el 200 aniversario de su nacimiento.</p>
  • <p><em>El capital</em>, obra ineludible para comprender el capitalismo, su historia y sus categor&iacute;as, es sin duda uno de los hitos de la historia del pensamiento. Con esta obra esencial, Marx no solo revolucion&oacute; el modo de concebir la econom&iacute;a, la filosof&iacute;a, la historia o la pol&iacute;tica, sino que describi&oacute; una nueva perspectiva desde la que analizar la sociedad que, a d&iacute;a de hoy, no ha sido superada.</p> <p>Nueva presentaci&oacute;n de este cl&aacute;sico en estuche. La obra se presenta en tres libros, tal como fueron concebidos originalmente. Una edici&oacute;n que integra el aparato cr&iacute;tico de Pedro Scaron en cada p&aacute;gina.</p>
  • 'La naturaleza del fascismo' recoge textos inéditos de Karl Polanyi, autor de 'La Gran Transformación', en pleno auge de los fascismos del siglo XX.
  • <p>Reinventar una izquierda emancipadora del siglo XXI exige reinventar una br&uacute;jula que incluya a la vez referencias cr&iacute;ticas de ayer y pensadores enfrentados a los desaf&iacute;os de hoy. Tal es la tarea que el soci&oacute;logo y fil&oacute;sofo franc&eacute;s Philippe Corcuff intenta en este libro, para lo cual se inspira tanto en la lectura her&eacute;tica de Marx como en la sociolog&iacute;a cr&iacute;tica de Pierre Bourdieu, o las filosof&iacute;as de Michel Foucault y de Emmanuel Levinas. Fruto de esta conexi&oacute;n, es su intento de reivindicar el lugar de la individualidad en una teor&iacute;a pol&iacute;tica libertaria, en estrecha relaci&oacute;n con el com&uacute;n. Lo cual tiene consecuencias para el an&aacute;lisis del capitalismo actual, haciendo de la contradicci&oacute;n capital/individualidad una de sus principales zonas de fragilidad. Tambi&eacute;n supone comprender con Foucault las relaciones entre las limitaciones sociales estructurales y las posibilidades de subjetivaci&oacute;n individual. El horizonte ut&oacute;pico de la pol&iacute;tica emancipadora se redefine gracias al pragmatismo filos&oacute;fico de John Dewey y a la fenomenolog&iacute;a de la apertura del ser de Levinas. Todo ello lleva a Philippe Corcuff a criticar algunas falsas soluciones de moda, especialmente los usos del concepto de hegemon&iacute;a de Antonio Gramsci y el populismo de izquierda de Ernesto Laclau y Chantal Mouffe. Asimismo, le permite contraponer una lectura anarquista de la serie Juego de Tronos a la lectura conformista de Pablo Iglesias.</p> <p>&nbsp;</p> <p>El libro esboza, a lo largo de diversos cap&iacute;tulos compuestos de escritos e intervenciones p&uacute;blicas, una &eacute;tica de la fragilidad que rechace los sue&ntilde;os de absoluto y de pureza, d&aacute;ndole el nombre parad&oacute;jico de socialdemocracia libertaria a ciertas pistas que van en esa direcci&oacute;n. Para tal fin, present&aacute;ndose como intelectual y militante intelectual, Philippe Corcuff identifica, en el espacio pol&iacute;tico emergente de las experiencias socialistas y comunistas del siglo XX, dos grandes v&iacute;as que trata de ampliar te&oacute;ricamente. Por una parte, la necesidad de renovar y ampliar las herramientas marxianas y &laquo;marxistas&raquo; de an&aacute;lisis cr&iacute;tico del mundo con los recursos sociol&oacute;gicos &laquo;posmarxistas&raquo;, y en particular con la cr&iacute;tica de las dominaciones desarrolladas por Pierre Bourdieu, la sociolog&iacute;a pragm&aacute;tica iniciada por Luc Boltanski y Laurent Th&eacute;venot, o las sociolog&iacute;as cr&iacute;ticas y comprensivas del individualismo. Por otra parte, una filosof&iacute;a pol&iacute;tica emancipadora enfrentada a antinomias permanentes, tales como las que existen entre la consolidaci&oacute;n de un espacio com&uacute;n de justicia y el desarrollo de las singularidades individuales, o entre las protecciones institucionales y la cr&iacute;tica libertaria de las opresiones institucionales.</p>
  • <p>Los cr&iacute;ticos de Marx, durante m&aacute;s de un siglo, han proclamado la existencia de contradicciones internas en las teor&iacute;as del valor, la ganancia y en diversas cr&iacute;ticas econ&oacute;micas contenidas en <em>El capital</em>. El presente libro, bas&aacute;ndose en trabajos que comenzaron a principios de los ochenta, pone en tela de juicio y refuta esas acusaciones.</p> <p>Al hacerlo, elimina la excusa principal que permite descalificar las teor&iacute;as de Marx en su forma original, y permite rechazar las diversas tentativas de &ldquo;corregirlo&rdquo;, fragmentarlo o subsumirlo en una u otra escuela econ&oacute;mica.</p> <p>Esta obra demuestra, pues, la inexistencia de contradicciones l&oacute;gicas internas al formular una interpretaci&oacute;n de las teor&iacute;as de Marx plena de sentido y coherencia.</p>
  • <p>De la c&eacute;lebre divisa revolucionaria &ndash;libert&eacute;, &eacute;galit&eacute;, fraternit&eacute;&ndash; la fraternidad, que entra&ntilde;aba la incorporaci&oacute;n plena de quienes viven por sus manos a una sociedad civil republicana de seres libres e iguales, es el gran valor olvidado. &iquest;C&oacute;mo y por qu&eacute; &eacute;sta, tras el punto culminante que supusieron las revoluciones de 1848 y sus aspiraciones a regular el derecho de propiedad, se fue desliendo paulatinamente hasta casi desaparecer?</p> <p>A recorrer las vicisitudes y peripecias del que fuera a la postre el programa del ala democr&aacute;tico-plebeya de la Ilustraci&oacute;n europea consagr&oacute; Antoni Dom&egrave;nech una obra sin par. Fruct&iacute;fera combinaci&oacute;n de narraci&oacute;n hist&oacute;rica y discusi&oacute;n conceptual y normativa, <em>El eclipse de la fraternidad</em> reconstruye magistralmente las luchas protagonizadas por la izquierda social y pol&iacute;tica, y muestra c&oacute;mo el viejo ideal de fraternidad republicana sigue siendo un astro poderoso que, aun eclipsado, determina el campo de gravedad de la pol&iacute;tica democr&aacute;tica contempor&aacute;nea.</p>
  • <p>Y el mayor m&eacute;rito del libro que tiene el lector en sus manos es la claridad con que ha comprendido su autor la capacidad y profundidad que confiere a cualquier trabajo te&oacute;rico, desarrollado en la estela de Marx, prescindir de objeciones simplistas y de supuestas novedades&quot; que presuntamente socavar&iacute;an la actualidad de estos fundamentos (por ejemplo, de un supuesto &quot;precariado&quot; que vendr&iacute;a a superar, y no a actualizar, el concepto de un proletariado que es, en esencia, precario, precisamente porque es mercanc&iacute;a y sigue la ley del valor)? y otras peque&ntilde;as cosas por el estilo.&quot; (Del Pr&oacute;logo del profesor Diego Guerrero)</p>
  • <p>&laquo;El Manifiesto Comunista ocupa un lugar muy especial en la historia de las revoluciones, tanto en la forma, exposici&oacute;n cl&aacute;sica, tono grandilocuente, estilo cortante y revelaci&oacute;n iluminadora, como en el contenido: la &quot;concepci&oacute;n materialista&quot; de sus autores, variante &quot;enderezada&quot; de la filosof&iacute;a de la historia de Hegel.</p> <p>Mientras que por una parte el Manifiesto Comunista puede ser considerado como la primera declaraci&oacute;n de guerra a la civilizaci&oacute;n burguesa desde una concepci&oacute;n materialista de la historia [...] es tambi&eacute;n preciso se&ntilde;alar que en sus consideraciones positivas (constructivas), los planteamientos del manifiesto no son de car&aacute;cter estrictamente revolucionarios, sino socialdem&oacute;cratas, reformistas&raquo;</p> <p>Miquel Amor&oacute;s</p>
  • <p>Luk&aacute;cs fue el m&aacute;s importante e influyente fil&oacute;sofo marxista del siglo XX. Entre sus obras m&aacute;s conocidas se encuentran Historia y consciencia de clase (1923) &ndash;la obra fundacional del llamado &ldquo;marxismo occidental&rdquo;&ndash;, El joven Hegel (1948), Goethe y su &eacute;poca (1950), Balzac y el realismo franc&eacute;s (1952), La novela hist&oacute;rica (1955), Contribuciones para una historia de la est&eacute;tica (1953) y los grandes tratados de vejez: La peculiaridad de lo est&eacute;tico (1963) y Para una ontolog&iacute;a del ser social (1984-1986). En el Testamento pol&iacute;tico el fil&oacute;sofo expone, pocos meses antes de morir, sus principales preocupaciones y expectativas acerca de la misi&oacute;n y las perspectivas del socialismo. El resto de escritos incluidos en este volumen incluye reflexiones sobre la funci&oacute;n del fil&oacute;sofo y el papel del intelectual, as&iacute; como consideraciones en torno a los consejos obreros y el ideal de democracia de la vida cotidiana, an&aacute;lisis y cr&iacute;ticas de la ideolog&iacute;a fascista, un arreglo de cuentas pol&iacute;tico y personal con el per&iacute;odo estaliniano, e ideas vinculadas con la &Eacute;tica que Luk&aacute;cs no hab&iacute;a llegado antes a escribir.</p>
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