<p>La relaci&oacute;n entre la comida y las ciudades es fundamental para nuestra vida cotidiana. La comida da forma a las ciudades y, a trav&eacute;s de ellas, nos moldea, junto con el campo, que nos alimenta. Podr&iacute;a decirse que alimentar ciudades tiene un mayor impacto social y f&iacute;sico sobre nosotros y nuestro planeta que cualquier otra cosa que hagamos. Pero pocos de nosotros en Occidente somos conscientes del proceso. La comida aparece como por arte de magia y rara vez nos detenemos a preguntarnos c&oacute;mo podr&iacute;a haber llegado all&iacute;. Este estudio ins&oacute;lito y revolucionario examina la forma en que la producci&oacute;n moderna de alimentos ha da&ntilde;ado el equilibrio de la existencia humana y revela problemas aun por resolver: desde la obesidad y el aumento inexorable de los supermercados, destrucci&oacute;n del mundo natural.</p>