<p>Esta obra tiene una doble condici&oacute;n: la de texto de referencia y la de obra de tesis, con la reivindicaci&oacute;n del valor &ndash;y la validez&ndash; del pensamiento laico, frente a la fuerte presencia del fundamentalismo religioso, en la reflexi&oacute;n social y pol&iacute;tica &aacute;rabes.</p> <p>El autor, un liban&eacute;s que siempre ha defendido posiciones laicas y panarabistas, se enfrenta a ese doble requerimiento con un texto erudito, que tiene el valor a&ntilde;adido de dar a conocer de forma sistem&aacute;tica el pensamiento de autores poco o nada conocidos en Occidente. Todos ellos inscritos en el triple marco de la tradici&oacute;n filos&oacute;fico-pol&iacute;tica &aacute;rabe (sin rechazar la de matriz isl&aacute;mica), la presencia &ndash;ineluctable&ndash; del pensamiento liberal democr&aacute;tico occidental (incluyendo el marxismo) y el impacto de los acontecimientos, casi siempre dram&aacute;ticos, en su reflexi&oacute;n.</p> <p>Partiendo de la reivindicaci&oacute;n de la existencia de un pensamiento &aacute;rabe distinto del isl&aacute;mico, Corm analiza la influencia en &eacute;l de cuestiones como la identidad &aacute;rabe a la luz de las nuevas circunstancias, el atraso de la regi&oacute;n, la desuni&oacute;n &aacute;rabe y sus resultados: la hegemon&iacute;a pol&iacute;tica occidental, el papel t&oacute;xico de la renta petrol&iacute;fera, los desequilibrios que crea el estado de Israel y sus apoyos, sobre todo, la relevancia del pensamiento religioso m&aacute;s r&iacute;gido a partir del concepto &laquo;el islam es la soluci&oacute;n&raquo;.<br /> Los pensadores que acoge esta obra muestran una gran variedad de posturas, todas unidas por la voluntad de dar respuestas realistas y no metaf&iacute;sicas a los grandes conflictos del mundo &aacute;rabe; habitualmente implicados en una militancia laica y democr&aacute;tica que puede costarles la vida o el exilio, todos ellos merecen un respeto intelectual que una praxis pol&iacute;tica deforme y la deriva orientalista conspiran para negarles.</p>