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<p>La Antología de textos de y sobre Salvador Seguí i Rubinat, <em>El Noi del Sucre</em> es un compendio actualizado y ampliado de sus artículos, entrevistas, mítines, resúmenes de intervenciones y textos biográficos; a los que se ha sumado un anexo con sus dos novelas cortas; aportaciones a su trayectoria elaboradas, pocos días después de su asesinato, por la redacción de la <em>Novela Roja</em>; y, la entrevista de 1974 a su compañera Teresa Muntaner.</p> <p>Seguí fue la figura más significativa y conocida de la CNT de mediados de los años diez y principios de los veinte del siglo XX. Su asesinato a manos de pistoleros de la patronal y del Estado contribuyó, sin duda, a agigantar aún más su relevancia entre las clases populares.</p> <p>Sobre su ideología y actividad sindical, social y política se han tramado toda una serie de hipótesis para alejarlo del anarquismo y del anarcosindicalismo o para conjeturar que, en los últimos momentos de su vida o de no haber sido asesinado, habría abrazado tal o cual ideología diferente a las anteriormente citadas y/o se hubiera implicado en el parlamentarismo.</p> <p>En esta <em>Antología</em> se pueden leer evidentes desmentidos de ambos supuestos y además conocer su gran capacidad para la observación y el análisis de la realidad política y su evolución (la Primera Guerra Mundial, la Revolución Rusa, el conflicto de Marruecos, el sistema monárquico y caciquil de la Restauración, la violencia empresarial y la deriva hacia un sistema político corporativo y dictatorial en España). Y, especialmente, sus posiciones sobre el papel y significado del sindicalismo revolucionario (anarcosindicalismo, a partir de 1922, con la entrada de la CNT en la AIT), que para él era la organización natural y prioritaria del proletariado; y, sobre su manera de entender el comunismo libertario.</p> <p>Este libro ha sido impreso cien años después de su asesinato como homenaje a Seguí y a todas las víctimas de la violencia patronal y estatal de los años de plomo.</p>
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<p>Esta emigración de supervivencia ofrece a las señoras de la fresa oportunidades de emancipación y autonomía. Es útil a España y Marruecos por medio de un deal que puede parecer inaceptable y plantea una cuestión ética: mujeres contra fresas. ¿Las mujeres españolas habrían aceptado esas condiciones para recolectar las fresas? ¡No! ¿Habrían aceptado separarse de sus hijos durante tres meses o más? ¡No! Se buscó, por tanto, no muy lejos, obreras dóciles, con criterios muy estrictos para que estas indeseadas no permanecieran en territorio español. ¿Puede imaginarse siquiera a miles de mujeres españolas trabajando en los invernaderos de fresas por un salario miserable en una región que se enriquece gracias a la comercialización del oro rojo? Enseguida habrían aparecido denuncias contra las condiciones de trabajo y alojamiento, contra la dureza del trabajo, y reivindicaciones salariales. ¿Qué otro trabajo impone a los adultos una vida en colectividad sin el más elemental respeto al derecho a la intimidad? Los procesos de emancipación no deben hacernos olvidar la precariedad y las condiciones de reclutamiento de estas mujeres, elegidas entre las más frágiles, desde un punto de vista social, de su país. Todos estos factores persiguen evitar la menor rebelión, la menor reivindicación, por pequeña que sea.</p>
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<p>Una oleada de suicidios durante el año 2010 en la ciudad-fábrica de Foxconn, en Shenzhen, sacó a la luz las condiciones infrahumanas en las que vive y trabaja su plantilla laboral, formada en su mayoría por jóvenes y migrantes, llegados de diferentes regiones rurales de China.</p> <p>Esta empresa es la mayor fabricante mundial de componentes electrónicos y da servicio a compañías como Apple, Amazon o Google. El cándido discurso de Silicon Valley —«el sentimiento de construir un mundo mejor gracias a la tecnología»— contrasta con las condiciones neoesclavistas que padecen las y los trabajadores de Foxconn, basadas en un taylorismo extremo y en una disciplina y vigilancia militarizadas, dentro y fuera de la cadena de montaje.</p> <p>Este libro recoge los testimonios de Yang, un estudiante y obrero industrial; Tian Yu, trabajadora migrante que sobrevivió a un intento de suicidio; y Xu Lizhi, que antes de poner fin a sus días dejó escritas descarnadas poesías que nos adentran en las fauces del sistema de Foxconn. Estos poemas, como el resto de textos, cuestionan el beneficio tecnológico, desde ese «otro lado del mundo», en relación con el coste humano, ecológico y social que entraña.</p> <p><em>«Hemos perdido el valor que nos corresponde como seres humanos y nos hemos convertido en una extensión de las máquinas, su apéndice, sí, su esclavo. Muchas veces pensaba que la máquina era mi amo y señor, cuyo cabello tenía que peinar como un esclavo.»</em></p>
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<p>Las críticas y disentimientos hacia el sindicalismo recogidos en estas cartas que aquí publicamos son del periodo intermedio entre la fecha de detención de Vanzetti y la de su asesinato por la justicia estadounidense. El análisis que éste hace no se basa en elaboraciones abstractas sino, sobre todo, en su experiencia práctica en la lucha obrera. sus lúcidas aportaciones aún hoy, más de 90 años después, no pierden fuerza y actualidad.</p> <p>“Hace tanto tiempo que afirmamos que muchos que se dicen o se creen socialistas no lo son, que la socialdemocracia es y será el último bastión del capitalismo, que el socialismo autoritario […] no es factible, que el cooperativismo, la conquista de los poderes públicos, el autoritarismo y el unionismo obrero arruinaron al proletariado. Hoy los hechos nos dan la razón.”<br /> “Llegará el momento en el que la historia dará su veredicto sobre esta plaga del proletariado de hoy, y el estudioso, más que de la ceguera de las masas y de la perversidad y la traición de sus jefes, se impresionará de la fe que tantos sinceros revolucionarios tuvieron en el unionismo obrero. Pero nuestro deber presente es despejar de todo obstáculo el camino hacia la revolución anarquista.”</p>