feminismo

  • <p>&laquo;Era necesaria una organizaci&oacute;n dirigida por mujeres y para las mujeres, una organizaci&oacute;n consagrada a superar la subordinaci&oacute;n de las mujeres en todas sus facetas, en el hogar, el centro de trabajo o en el movimiento anarcosindicalista mismo&raquo;.</p> <p>Mujeres Libres naci&oacute; en 1936 con la urgencia de crear una organizaci&oacute;n dirigida por y para las mujeres que, en aquellos d&iacute;as de fervor revolucionario, ansiaban una transformaci&oacute;n social, profunda y efectiva en todos los &aacute;mbitos.</p> <p>Con un impecable rigor hist&oacute;rico y apoy&aacute;ndose en multitud de testimonios, Martha A. Ackelsberg reconstruye la historia de una organizaci&oacute;n a la que, en apenas tres a&ntilde;os, se adhirieron m&aacute;s de veinte mil mujeres dispuestas a ocupar su lugar en la revoluci&oacute;n y en la nueva sociedad. En este estudio, se analizan las razones y necesidades de coordinaci&oacute;n de quienes, haciendo de la capacitaci&oacute;n y la sororidad sus pilares elementales, tuvieron que enfrentarse a la mayor parte de sus compa&ntilde;eros y a las propias estructuras org&aacute;nicas del movimiento libertario, ancladas en l&oacute;gicas que garantizaban los privilegios masculinos. Los debates de entonces sirven ahora para contextualizar las desigualdades propias de una &eacute;poca que hoy, lejos de estar superadas, siguen siendo desaf&iacute;os de primer orden. O estas cuestiones son integradas como fundamentos esenciales de la lucha por la liberaci&oacute;n o cualquier sociedad futura arrastrar&aacute; consigo los<br /> lastres de la dominaci&oacute;n patriarcal.</p> <p>La obra de Mujeres Libres nos interpela y pone de manifiesto, ochenta a&ntilde;os despu&eacute;s, la actualidad de esos desencuentros y la inaplazable necesidad de abordarlos y superarlos.</p>
  • <p>El presente libro trata de desvelar las causas que llevaron a que las reivindicaciones de las mujeres negras fueran sistem&aacute;ticamente invisibilizadas a pesar del potencial revolucionario que encerraba un movimiento semejante. En sus distintos cap&iacute;tulos, Angela Y. Davis ofrece un an&aacute;lisis riguroso y esclarecedor que no s&oacute;lo pone de manifiesto las estrategias de lucha de las mujeres negras, sino los problemas de composici&oacute;n de las diferencias que siguen desgarrando los movimientos pol&iacute;ticos actuales.</p>
  • <p>En <em>No al futuro</em>, Edelman insta a las personas queer a abandonar las posiciones c&oacute;modas o integradas, y a asumir la fuerza de una negatividad que &eacute;l vincula con la iron&iacute;a, el goce y, en &uacute;ltima instancia, con la pulsi&oacute;n de muerte.</p> <p>Traducido por Javier S&aacute;ez y Adriana Baschuk Para ilustrar su tesis, Edelman analiza algunos textos cl&aacute;sicos de la literatura, y especialmente dos famosas pel&iacute;culas de Alfred Hitchcock: &quot;Con la muerte en los talones&quot;, donde el s&aacute;dico Leonard pisa la mano que sostiene a la pareja (hetero) que est&aacute; colgando al borde del abismo, y &quot;Los p&aacute;jaros&quot;, con su terror desconcertante y su predilecci&oacute;n por los ni&ntilde;os.&nbsp;</p> <p>Edelman ampl&iacute;a el alcance de la teor&iacute;a psicoanal&iacute;tica contempor&aacute;nea no solo a obras de la literatura y el cine, sino tambi&eacute;n a debates pol&iacute;ticos actuales, como el matrimonio igualitario, la paternidad/maternidad de las personas LGBT y la homofobia de los grupos religiosos integristas.</p>
  • <p>Otra subrogaci&oacute;n es posible aborda el pol&eacute;mico tema de la subrogaci&oacute;n gestante, cuyo debate es a&uacute;n incipiente en nuestro pa&iacute;s, desde el marxismo, el feminismo y la teor&iacute;a queer, y lanza un grito radical en favor de la justicia gestacional.</p> <p>Ampliamente documentado, el libro analiza las condiciones materiales en las que actualmente se desarrolla la subrogaci&oacute;n a nivel internacional, y dedica una especial atenci&oacute;n a la prestigiosa cl&iacute;nica Akanksha, fundada y dirigida por la doctora Patel en el estado indio de Guyarat, que en algunas ocasiones ha sido definida como la f&aacute;brica de beb&eacute;s del mundo.</p> <p>Partiendo de la base de que la gestaci&oacute;n y la crianza son siempre un trabajo productivo, y como tal merece ser retribuido, Sophia Lewis defiende la subrogaci&oacute;n sin l&iacute;mites y se muestra cr&iacute;tica con el marco liberal-capitalista en el que se da en la actualidad, cuyas argucias pone al descubierto.</p> <p>Con la subrogaci&oacute;n en el centro, y la gestaci&oacute;n c&iacute;borg como perspectiva, desarma la familia por diversas que sean sus formas, y la concepci&oacute;n tan largamente asentada de que la prole pertenece a quienes comparten su material gen&eacute;tico. La crianza colectiva, sostiene, transformar&aacute; radicalmente las actuales nociones de parentesco y nos ayudar&aacute; a comprender que se necesita a la comunidad entera para criar a un beb&eacute;.</p> <p>Una tesis rompedora que ampl&iacute;a las fronteras del debate y no dejar&aacute; a nadie indiferente.</p>
  • Partisanas

    22,50
    <p>Hannie Schaft, conocida como &laquo;la chica pelirroja&raquo;, era a sus veinte a&ntilde;os una de las terroristas m&aacute;s buscadas por la Gestapo en los Pa&iacute;ses Bajos. En Varsovia los ejecutores de la soluci&oacute;n final intentaban atrapar a &laquo;la peque&ntilde;a Wanda con las trenzas rubias&raquo;, que se llamaba Niuta Tejtelbojm, ten&iacute;a veinte a&ntilde;os y era jud&iacute;a.</p> <p>En los frentes de la Guerra Civil espa&ntilde;ola, los militares facciosos de Franco se las ten&iacute;an que ver con milicianas de diecis&eacute;is a&ntilde;os. En los guetos del este de Europa, en los Pa&iacute;ses Bajos, en el ej&eacute;rcito partisano de Tito, de Lyon a Bialystok, muchas mujeres empu&ntilde;aron las armas contra el terror nacionalsocialista y fascista. <br /> <br /> Pero la derrota del fascismo no signific&oacute; el reconocimiento de su labor en la resistencia armada. La guerra fr&iacute;a ya dominaba la l&oacute;gica pol&iacute;tica y los homenajes y el recuerdo hist&oacute;rico se limitaron generalmente a celebrar la oposici&oacute;n controlada por los aliados. La resistencia comunista y anarquista fue cubierta con un manto de olvido, cuando no perseguida durante la posguerra; y de la mujer se esperaba su vuelta silenciosa al hogar, ignorada muchas veces su labor en la guerra hasta por sus propios camaradas. Hab&iacute;an cuestionado demasiado profundamente su rol de seres pac&iacute;ficos e indefensos, y durante a&ntilde;os s&oacute;lo merecieron el desprecio o el silencio de la historiograf&iacute;a de la resistencia. <br /> <br /> <em>Partisanas</em> nos adentra en un cap&iacute;tulo silenciado de nuestra historia reciente, rindiendo un merecido homenaje a toda una generaci&oacute;n de luchadoras.</p>
  • <p>Fil&oacute;sofas, rebeldes, activistas: este libro gr&aacute;fico cuenta la historia del feminismo en el contexto euro-norteamericano desde la Antig&uuml;edad hasta nuestros d&iacute;as. En sus p&aacute;ginas no s&oacute;lo se abordan sus principales figuras, sino tambi&eacute;n importantes debates feministas,como, por ejemplo, la igualdad de derechos, el trabajo dom&eacute;stico, el amor libre, la identidad y la diferencia, o las principales corrientes en lo relativo al g&eacute;nero, cada uno en su respectivo contexto hist&oacute;rico.</p> <p>De este modo, el lector tendr&aacute; claro que el feminismo no tiene un contenido concreto, establecido, sino que es la contribuci&oacute;n activa de las mujeres a los debates sociales de su tiempo, y que sus temas e inquietudes van cambiando conforme a c&oacute;mo lo hace el propio movimiento femenino. Ya se trate de m&iacute;sticas medievales, fil&oacute;sofas de la Edad Moderna, juristas contempor&aacute;neas o activistas radicales, todas ellas tienen en com&uacute;n su amor por la libertad femenina. Su ejemplo pone de manifiesto que el feminismo no es algo que se pueda &laquo;aprender&raquo;, sino el reto de tener una opini&oacute;n propia y de asumir su responsabilidad. Pero para ello es importante conocer la historia y buscar inspiraci&oacute;n en los debates del pasado.</p>
  • <p>La victimizaci&oacute;n de las mujeres es inseparable del rol hist&oacute;rico que se les ha atribuido en relaci&oacute;n con la violencia. Reducir su papel al de cuidadoras u objetos de protecci&oacute;n por parte de los hombres ha servido para criminalizar y castigar como monstruosa toda desviaci&oacute;n de esa denominada &laquo;condici&oacute;n femenina&raquo;. Mediante la ley y las instituciones, y desde los medios de comunicaci&oacute;n y las propias relaciones sociales, se articula y se transforma una norma de g&eacute;nero que castiga a quienes la transgreden. <em>Putas e insumisas</em> no solo cuestiona este escenario de opresi&oacute;n, sino que reivindica la autonom&iacute;a y la capacidad de autodefensa individual y colectiva, desmitificando la relaci&oacute;n social e imaginaria que dibuja a las mujeres como seres pasivos. Las mujeres recibimos... pero tambi&eacute;n repartimos.</p>
  • <p>La hist&oacute;rica revista mujeres Libres se imprimi&oacute; por primera vez en mayo de 1936. Editada por mujeres del poderoso movimiento libertario, la revista buscaba a trav&eacute;s de la formaci&oacute;n, la reflexi&oacute;n y la denuncia, dotar a las mujeres de una voz espec&iacute;fica en la lucha global por la igualdad y la libertad de los seres humanos.</p> <p>&nbsp;</p> <p>&ldquo;El primer objetivo de la lucha de la mujer consiste en hacer comprender al hombre y en primer lugar a sus padres, hermanos y parientes, qye sin la libertad de las mujeres no vale nada la de los hombres&rdquo; o &ldquo;Estamos ciertas que miles de mujeres reconocer&aacute;n aqu&iacute; su propia voz, y pronto tendremos junto a nosotras toda una juventud que se agita desorientada en f&aacute;bricas, campos y universidades, buscando afanosamente la manera de encauzar en f&oacute;rmulas de acci&oacute;n sus inquietudes&rdquo;. Son dos de las declaraciones de intenciones que las editoras incluyeron en este primer n&uacute;mero.</p> <p>La revista pronto se convirti&oacute; en el &oacute;rgano de expresi&oacute;n de Mujeres Libres, una organizaci&oacute;n que lleg&oacute; a contar con 28.000 mujeres afiliadas, 147 agrupaciones locales conocidas y una gran actividad cultural, pedag&oacute;gica y revolucionaria.</p> <p>--</p> <p>Dentro de la labor de difusi&oacute;n de la cultura libertaria, la Fundaci&oacute;n Anselmo Lorenzo ha decidido reimprimir la primera &eacute;poca (1936-39) de esta revista anarcofeminista, sepultada en la doble fosa del fascismo y del patriarcado. Desenterrar la historia escrita por nuestras compa&ntilde;eras, precursoras de un mundo nuevo, y que su lucha sirva de experiencia, aprendizaje e inspiraci&oacute;n al movimiento feminista actual. Porque fueron somos. Porque somos, ser&aacute;n.</p>
  • <p>Este libro ofrece un conjunto de reflexiones que el campo de la salud debe absorber para incidir con conductas que promuevan la autonom&iacute;a y la dignidad. Resulta consternadora la r&eacute;mora de las viejas concepciones acerca de los procesos de salud-enfermedad, la ceguera cognitiva respecto de la generizaci&oacute;n inexorable de tales fen&oacute;menos y, muy especialmente, la recusa de percepci&oacute;n contextual para hacer inteligible el lenguaje del cuerpo que enuncia sus significados contrariando a los presupuestos naturales. A menudo he sostenido una advertencia, y me parece m&aacute;s que adecuado dar la bienvenida a este libro volviendo a ella: para quienes creen a pie juntillas que hay una lectura transparente de los fen&oacute;menos de la naturaleza, es bueno que sepan que la naturaleza no sabe que se llama naturaleza. Su lenguaje es el que hemos inventado, una arbitraria operaci&oacute;n mediadora con la que damos por sentado principios y leyes. Conviene abdicar de su prepotencia, y hacer de la salud un estatuto libertario, tal como emerge como acicate de las p&aacute;ginas de este texto.</p> <p>Art&iacute;culos de Dora Barrancos, Sabrina Bala&ntilde;a, Agostina Finielli, Carla Giuliano, Andrea Paz, Carlos Ram&iacute;rez, Marta Dillon, Moira P&eacute;rez, Laura Contrera, D&eacute;bora Tajer, Luciano Fabbri, Blas Radi, Karina Felitti, Valeria Salech, Violeta Osorio, Julieta Saulo y Ruth Zurbriggen.</p>
  • <p>La respuesta pol&iacute;tica al estallido financiero ha vuelto a imponer la prioridad de los mercados sobre la vida. Sin duda, su sostenimiento sigue estando privatizado, invisibilizado, feminizado. A partir de la discusi&oacute;n sobre la econom&iacute;a feminista, este libro detalla las bases de<br /> un sistema injusto e inviable, fundado en la division sexual del trabajo y el expolio del planeta. <br /> <br /> Su prop&oacute;sito consiste en mirar &laquo;m&aacute;s ac&aacute;&raquo; de los mitos del desarrollo (crecimiento ilimitado), la riqueza (acumulaci&oacute;n de capital) y el trabajo (limitado al trabajo asalariado) y a la vez dar cuenta de las tareas, redes y sujetos econ&oacute;micos que, material y cotidianamente, garantizan que la vida siga adelante. En este momento de tr&aacute;nsito, en el que el Estado del bienestar se ha escorado hacia los mercados, esta obra muestra la urgencia de discutir, radical y democr&aacute;ticamente, qu&eacute; vida creemos digna de ser vivida y c&oacute;mo podemos organizarnos para sostenerla de forma colectiva.</p>
  • Frente a los intentos de expulsarlas a un régimen de apartheid social y jurídico bajo el pretexto de su salvación, esta obra apuesta por el fortalecimiento de la legitimidad, de los derechos y de la capacidad organizativa de las trabajadoras sexuales como el único camino verdaderamente emancipador.
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