colonialismo

  • <p>De la emancipaci&oacute;n de la servidumbre a las herej&iacute;as subversivas, un hilo rojo recorre la historia de la transici&oacute;n del feudalismo al capitalismo. Todav&iacute;a hoy expurgado de la gran mayor&iacute;a de los manuales de historia, la imposici&oacute;n de los poderes del Estado y el nacimiento de esa formaci&oacute;n social que acabar&aacute; por tomar el nombre de capitalismo no se produjeron sin el recurso a una extrema violencia. La acumulaci&oacute;n originaria exigi&oacute; la derrota de los movimientos campesinos y urbanos, que normalmente bajo la forma de la herej&iacute;a religiosa reivindicaron y pusieron en pr&aacute;ctica diversos experimentos de vida comunal y reparto de la riqueza. Su aniquilaci&oacute;n abri&oacute; el camino a la formaci&oacute;n del Estado moderno, la expropiaci&oacute;n y cercado de las tierras comunes, la conquista&nbsp; y expolio de Am&eacute;rica, la apertura del comercio de esclavos a gran escala y una guerra contra las formas de vida y las culturas populares que tom&oacute; a las mujeres como su principal objetivo.</p> <p>Al analizar la quema de brujas, Federici no s&oacute;lo desentra&ntilde;a uno de los episodios m&aacute;s inefables de la historia moderna, sino el coraz&oacute;n de una poderosa din&aacute;mica de expropiaci&oacute;n social dirigida sobre el cuerpo y la reproducci&oacute;n femenina. &Eacute;sta constituye a un tiempo el acta de nacimiento de nuestra &eacute;poca como el registro de unas voces imprevistas (las de los subalternos: Calib&aacute;n y la bruja) que todavia hoy resuenan con fuerza en las luchas que resisten a la continua actualizaci&oacute;n de la violencia originaria.</p>
  • <p>El presente libro es un compendio de la evoluci&oacute;n que han sufrido el pensamiento y la metodolog&iacute;a de su autor, y con ello, el propio concepto y contenido del pensamiento decolonial. En sus distintos cap&iacute;tulos, se puede comprobar la importancia que tuvo el movimiento antiimperialista y el pensamiento de los autores afro-caribe&ntilde;ios en el or&iacute;gen de los estudios poscoloniales, para luego pasar a las matizaciones y cambios que se fueron produciendo en ellos con el paso de los a&ntilde;os.</p> <p>El &uacute;ltimo bloque, &quot;Crisis de la modernidad colonial y conciencia antisist&eacute;mica&quot;, se centra en lo acontecido en los tiempos m&aacute;s recientes, con la quiebra del paradigma de la Modernidad occidental (y, por consiguiente, de la hegemon&iacute;a estadounidense y del sistema neoliberal) para abrir paso a las distintas alternativas que se han ido forjando en este tiempo, con especial atenci&oacute;n a la experiencia latinoamericana.</p> <p>A lo largo de sus p&aacute;ginas el lector se encontrar&aacute; con uno de los pensadores m&aacute;s importantes e impactantes de la llamada teor&iacute;a decolonial latinoamericana y caribe&ntilde;a, adem&aacute;s de figura clave de los movimientos antiimperialistas y decoloniales en el siglo XXI, y un te&oacute;rico fundamental para comprender las luchas antirracistas desarrolladas por diferentes comunuidades, minor&iacute;as y pueblos a lo largo y ancho del planeta.</p>
  • <p>&laquo;&iquest;Cu&aacute;l es la magnitud cr&iacute;tica que conduce al abuso? La respuesta no es muy dif&iacute;cil. Es todo aquel volumen de poder que confiere inmunidad frente a la represalia. [...] lo que podr&iacute;amos llamar la &ldquo;teor&iacute;a del poder de la miseria social&rdquo;.&raquo;</p> <p>El colapso de las naciones es un ensayo en forma de s&aacute;tira que reivindica para nuestros d&iacute;as la &laquo;idea de la proporci&oacute;n&raquo;: una propuesta humilde. Su incorrecci&oacute;n pol&iacute;tica denuncia el culto al tama&ntilde;o como la patolog&iacute;a esencial del siglo XX. Y lo hace con un estilo c&aacute;ustico que, por momentos, nos recuerda a la iron&iacute;a de Swift o la l&iacute;rica de Safo.</p> <p>Hoy &mdash;m&aacute;s de medio siglo despu&eacute;s de su primera publicaci&oacute;n en 1957&mdash;, revisitamos los escenarios nacionales para confirmar que los abusos que Leopold Kohr describi&oacute; contin&uacute;an impunes. El autor plantea que para revertir esta din&aacute;mica es necesario el desmembramiento de los vastos complejos nacionales y que los Estados naci&oacute;n renuncien a su hegemon&iacute;a. Aunque la propuesta parezca ingenua, en el mundo contempor&aacute;neo solo las grandes potencias poseen la dimensi&oacute;n que permite extender la miseria social que intentamos prevenir.</p> <p>Su cr&iacute;tica anticip&oacute; los l&iacute;mites de la l&oacute;gica de bloques tanto dentro como fuera de la eurozona, y reinterpret&oacute; el colapso global como una crisis indefectible de la magnitud cr&iacute;tica. En pleno siglo XXI, con el mantra de la unificaci&oacute;n salvapatrias de regreso, su vigencia es innegable. Como dijo Gulliver durante uno de sus viajes: &laquo;La raz&oacute;n no aumenta con el tama&ntilde;o del cuerpo&raquo;.</p>
  • <p>Este volumen re&uacute;ne las conocidas y bastante discutidas ponencias W. E. B. Du Bois que Stuart Hall impartiera en la Universidad de Harvard en 1994. En el momento de su mayor plenitud intelectual, el jaimacano disecciona cr&iacute;ticamente el concepto de raza, su sustituci&oacute;n moderna por el de etnia y la remisi&oacute;n de este &uacute;ltimo a la naci&oacute;n pol&iacute;tica. Se tata de un ejercicio sofisticado y agudo, en el que muestra c&oacute;mo el horizonte de la raza, aun desprovisto de toda la vieja ideolog&iacute;a biologicista y pseudocient&iacute;fica, sigue marcando la experiencia social contempor&aacute;nea, tanto en sus formas racistas como antirracistas. El marco a combatir es el de un esencialismo con el que se marginan, pero tambi&eacute;n se afirman, determinados grupos sociales. A su vez, la expresi&oacute;n aparentemente m&aacute;s culturalista de la &laquo;etnia&raquo; tampoco supera la imagen de unas comunidades segregadas, cerradas, culturalmente autosuficientes.</p> <p>Hall nos muestra aqu&iacute; c&oacute;mo la pol&iacute;tica del siglo XXI est&aacute; esencialmente atravesada por el hecho de la diferencia, apuntalada adem&aacute;s por la nueva ola de migraciones masivas con direcci&oacute;n sur-norte. La articulaci&oacute;n de esta pol&iacute;tica en forma de alianzas abiertas, a partir de la experiencia de la di&aacute;spora, del mestizaje y de la traducci&oacute;n de experiencias distintas parece ser el reto de este libro, as&iacute; como de todos aquellos implicados en una pol&iacute;tica netamente emancipatoria.</p>
  • <p>El soberanismo en Europa es uno de los s&iacute;ntomas de lo que Mellino -uno de los principales estudiosos de las cuestiones poscoloniales- llama la &laquo;crisis del consenso Maastricht-Schengen&raquo;, es decir, el agotamiento del modelo ordoliberal de gobernanza que sent&oacute; las bases de la actual constituci&oacute;n material del territorio europeo. El texto sit&uacute;a el inicio de esta &laquo;crisis de hegemon&iacute;a&raquo; en la ruptura de 2008, siendo la &laquo;crisis de los refugiados&raquo; de 2015 el golpe de gracia que hizo saltar por los aires los &uacute;ltimos veinte a&ntilde;os de gesti&oacute;n europea de las fronteras.</p> <p>Desde entonces, la Uni&oacute;n Europea y el soberanismo se presentan como dos formas diferentes de &laquo;gobernar la crisis&raquo;. Sin embargo, m&aacute;s all&aacute; de las diferencias de tono, gesti&oacute;n y recetas econ&oacute;micas, estas dos alternativas est&aacute;n vinculadas en tanto sit&uacute;an en el centro de su propuesta pol&iacute;tica la promesa de una administraci&oacute;n cada vez m&aacute;s excluyente, selectiva, racista y policial del estatuto de la ciudadan&iacute;a moderna. Esta es la verdadera cara de Europa en este momento de crisis y estancamiento econ&oacute;mico.</p> <p>A trav&eacute;s de la revisi&oacute;n de diversos autores como Marx, Sartre, Foucault, Agamben, Fanon, C&eacute;saire, Angela Davis y otros, el texto propone repensar el papel del racismo en los dispositivos de gobierno neoliberales tanto de la Uni&oacute;n Europea como de sus aliados nacionales y los populismos reaccionarios. Este libro es una valiosa herramienta de reflexi&oacute;n sobre un posible gobierno de la inmigraci&oacute;n diferente al que est&aacute; en marcha en los distintos pa&iacute;ses de la Uni&oacute;n Europea.</p>
  • Un texto fundacional y de referencia de la crítica descolonial, con algunas de las tesis más enriquecedoras y fructíferas a la hora de cuestionar las lógicas heredadas del racismo y del sexismo.
  • <p>El lector se encuentra ante una obra reveladora y necesaria: una selecci&oacute;n de textos, a partir de la Guerra de los Seis D&iacute;as y hasta la actualidad, que denuncian la pol&iacute;tica hacia los palestinos del Estado de Israel &ndash;desde la ocupaci&oacute;n hasta las exacciones y las violencias de distintos tipos&ndash; desde el interior del mismo: activistas pol&iacute;ticos, periodistas, profesores universitarios o simplemente personas de buena voluntad, desgranan en estas p&aacute;ginas reflexiones, denuncias y llamamientos cuyo denominador com&uacute;n es la insistencia en considerar a los palestinos como iguales y en afirmar que la ocupaci&oacute;n y la opresi&oacute;n &ndash;que, a su vez, arrastran intolerancia y corrupci&oacute;n&ndash; son contradictorios con los principios sionistas.</p> <p>Es eso lo que lleva a Avraham Burg, antiguo presidente del Parlamento israel&iacute;, a afirmar, en uno de los art&iacute;culos de este libro, lo que proclama su t&iacute;tulo: que &laquo;la revoluci&oacute;n sionista ha muerto&raquo;.</p>
  • <p>El conflicto entre tamiles y cingaleses en Sri Lanka empez&oacute; mucho antes de las guerras civiles de los a&ntilde;os 80 o de la aparici&oacute;n de la insurgencia armada en los 70. Previamente, cuando el pa&iacute;s todav&iacute;a se llamaba Ceil&acute;na y a&uacute;n manten&iacute;a v&iacute;nculos postcoloniales con el Reino Unido, ya hubo varias campa&ntilde;as noviolentas contra la discriminaci&oacute;n del idioma tamil. Aunque tradicionalmente se ha explicado el fracaso de estas movilizaciones como consecuencia de la represi&oacute;n cingalesa, este estudio demuestra que influyeron varios factores, algunos relativos a la propia organizaci&oacute;n del movimiento y otros a la problem&aacute;tica derivada de las dificultades para lanzar una campa&ntilde;a no violenta tan solo en una parte del pa&iacute;s.&nbsp;</p>
Ir a Arriba